A pocos días de las elecciones presidenciales, sería bueno y conveniente que los candidatos reflexionen acerca de lo siguiente: Según la Biblia, cuando el rey Salomón se disponía a construir el templo que David había prometido al Señor y no pudo, Dios le habló para decirle: ‘Si caminas según mis preceptos, si obras según mis normas y guardas todos mis mandamientos, yo cumpliré lo que dije a tu padre David acerca de ti. Hablaré en medio de los hijos de Israel, en esta casa que estás construyendo, y no abandonaré a mi pueblo”. Si a esta secuencia de la vida del pueblo israelita la trasladamos a nuestro país, veremos que no es tan grave el esfuerzo de reconstruirlo, sino que lo más importante es la intención con que hagamos las cosas. Siguiendo los mandamientos de Dios, indefectiblemente todo tiene que salir bien en lo que hagamos. Y contando con Su presencia entre nosotros, con más razón. Piensen, candidatos; piense pueblo argentino que siente que peor de lo que estamos no podemos estar. Y pongamos todo lo mejor de cada uno para salir adelante.
Daniel E. Chavez
Pasaje Benjamín Paz 308 - San Miguel de Tucumán