KABUL, Afganistán.- El régimen del Talibán de Afganistán vetó la entrada de mujeres al parque de Band-e-Amir, Patrimonio Mundial de la Unesco y destino turístico de las familias por sus espectaculares lagos en la provincia de Bamiyán, al considerar que muchas de las visitantes no usaban el velo obligatorio o hiyab y que el turismo no es un derecho.
Band-e-Amir es una de las principales atracciones turísticas de Bamiyán. Se convirtió en el primer parque nacional del país en 2009 y atrae a miles de visitantes cada año. Es una importante fuente de ingresos para la población local y sus negocios de turismo, restaurantes, hoteles y artesanía.
La prohibición desató las críticas de organizaciones internacionales que defienden los derechos humanos, preocupadas por el brutal retroceso en las libertades de las mujeres bajo el régimen de fanáticos religiosos que domina Afganistán.
“No contentos con privar a las niñas y mujeres de la educación, el empleo y la libre circulación, los talibanes también quieren quitarles los parques y el deporte y ahora incluso la naturaleza”, denunció la directora asociada de Derechos de la Mujer de Human Rights Wath, Heather Barr.
“Paso a paso, los muros se cierran para las mujeres, cada casa se convierte en una cárcel”, agregó, tras calificar la decisión de “cruel” y “totalmente deliberada” para hacer sufrir a las mujeres afganas.
Los talibanes prohibieron el sábado el acceso de las mujeres al parque argumentando que no respetan las reglas de vestimenta, según anunció a los medios el ministro de Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, Mohammad Khalid Hanafi, tras una reunión con líderes religiosos locales afines al régimen totalitario.
“Tenemos que tomar medidas más serias desde hoy” para evitar esta falta de respeto por el hiyab, dijo.
“Las mujeres y nuestras hermanas no pueden ir a Band-e-Amir hasta que alcancemos un principio de acuerdo. Las agencias de seguridad, los ancianos y los inspectores deberían tomar medidas al respecto. Ir a hacer turismo no es un deber”, afirmó Hanafi al finalizar el encuentro, según el medio afgano ToloNews.
“El turismo existe, pueden hacer turismo, pero no es obligatorio”, y por lo tanto no es ningún escándalo prohibirlo, añadió.
Esta nueva prohibición se suma a la larga lista de restricciones que ya adoptaron los talibanes desde su llegada al poder contra las mujeres. El Relator Especial de la ONU sobre derechos humanos en Afganistán, Richard Bennett, trasladó el domingo su malestar con la medida en la red social X (antes llamada Twitter), preguntándose por qué esta restricción “es necesaria para cumplir con la Sharia (ley islámica según la interpretación fanática de este grupo) y la cultura afgana”.
Desde que tomaron el control del país el 15 de agosto de 2021, tras la retirada de las fuerzas estadounidenses y de la alianza militar atlántica (OTAN) han impuesto cada vez más restricciones dirigidas a las niñas y mujeres afganas, entre ellas impedir que vayan a la escuela más allá del sexto grado y prohibirles trabajar en organizaciones locales y no gubernamentales, al tiempo que han tomado medidas enérgicas contra los medios de comunicación.
Además, han dictado restricciones que obligan a las mujeres a salir a la calles con el rostro cubierto, han impuesto la segregación por sexos en las escuelas y han impuesto que sólo pueden ir en viajes largos acompañadas de un familiar masculino.
Para hacer cumplir esta nueva medida restrictiva de las libertades, el gobierno del Talibán anunció que utilizará a las fuerzas de seguridad. La media empieza por Band-e-Amir, los parques nacionales más populares de Afganistán, pero se teme que se extienda a todos los territorios turísticos del país.
En noviembre, el gobierno prohibió a las mujeres utilizar los espacios públicos, incluidos los parques, alegando que no llevaban el hiyab correctamente o no seguían las normas de segregación de género.
El portavoz del Ministerio, Molvi Mohammad Sadiq Akif, compartió un informe de las declaraciones de Hanafi a última hora de la noche del sábado 26 de agosto, que incluía el uso de fuerzas de seguridad, clérigos y ancianos para llevar a cabo la orden de Hanafi. Una grabación del discurso del ministro en Bamiyán, que coincide con el informe de Akif, se compartió en las redes sociales. (Especial)