Querida ciudadanía: como un argentino más, les pido premura y mucho respeto con cada una de sus reflexiones personales, a la hora de opinar sobre las próximas elecciones presidenciales y sus diferentes candidatos. Realmente es deprimente cómo están actuando, “a fuego cruzado” entre uno y otro postulante ante la opinión pública; usando su verborragia de tono amenazante, sin importarles la investidura, hasta usando actos intimidatorios de gravedad, como arrojarle combustible a una candidata en un acto político. Esto es gravísimo, antidemocrático y lo peor de todo es que nadie le pone frenos a la situación; si no nos controlamos entre todos, vamos por un muy mal camino... Por favor, ciudadanos, obremos con calma y sin odio; busquemos la mejor salida para nuestra patria; lo hagamos por nuestras familias...
Daniel Francisco Leccese
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