Se abre la temporada de premios con la reciente edición de los Globos de Oro 2024 y, como todos los años, volvemos a hablar sobre la representación de las mujeres en la industria cinematográfica. A pesar de avances notables, la lucha por la igualdad de género en Hollywood sigue siendo una batalla cuesta arriba, reflejada no solo en las nominaciones sino también en la toma de decisiones, desde la selección de proyectos hasta la asignación de presupuestos.

El éxito cultural de “Barbie” el año pasado la catapultó como la película más taquillera dirigida por una mujer en la historia, gracias a la visión única de Greta Gerwig. Sin embargo, los números detrás de la película y las nominaciones para los Globos de Oro han destapado una serie de obstáculos que las mujeres en la industria aún enfrentan. Según la estadística Celluloid Ceiling (techo de celuloide en español) que presenta todos los años la Universidad de San Diego, a pesar del impacto de “Barbie”, las directoras siguen subrepresentadas, ocupando solo el 16% de los 250 filmes más taquilleros y el 14% de los 100 de mayor convocatoria.

Este estudio también revela que el conjunto de mujeres directoras, guionistas, productoras, montajistas y directoras de fotografía representa apenas el 22% de los equipos en los principales proyectos, con una disminución de dos puntos en comparación con 2022. Solo un 4% de las películas de mayor recaudación contrató a 10 mujeres o más para su plantel, evidenciando un desequilibrio alarmante en la composición de los equipos creativos.

Los datos también señalan que el 75% de las películas de mayor recaudación en 2023 emplearon a más de 10 hombres en roles clave, mientras que solo un 4% hizo lo mismo con 10 mujeres o más. Esto subraya la necesidad urgente de abordar la disparidad de género en la toma de decisiones y la asignación de recursos en la industria.

El estudio sobre inclusión en el rol de dirección la Escuela de Comunicación y Periodismo de la Universidad del Sur de California, que se lleva a cabo desde hace 17 años, revela que las mujeres estuvieron al mando creativo en solo el 6% de las producciones más exitosas. Este desalentador porcentaje resalta la resistencia persistente que las mujeres encuentran al tratar de acceder a roles de dirección en proyectos cinematográficos de alto perfil.

A pesar de la iniciativa (un poco vaga) de algunas productoras, como Universal Pictures, que lidera el ranking de contrataciones femeninas con cuatro mujeres para el rol de dirección en los últimos 17 años; y seguida por Lionsgate con tres, y Walt Disney Studios con dos. El informe subraya que las grandes distribuidoras enfrentan dificultades para dar luz verde a películas lideradas por mujeres y personas de color en roles de dirección.

La industria cinematográfica desempeña un papel crucial en la formación de opiniones y en la construcción de imágenes sociales. La representación de mujeres detrás y delante de la cámara influye directamente en cómo se perciben las mujeres y sus roles en la sociedad. La falta de diversidad en las historias contadas y en las personas que las cuentan contribuye a la persistencia de estereotipos y limita la comprensión completa de las experiencias femeninas.

La nominación de Greta Gerwig como presidenta del jurado del próximo Festival de Cannes es un reconocimiento significativo, pero también subraya la necesidad de un cambio sistémico en la industria. Celebrar a mujeres destacadas es esencial, pero no puede ser suficiente. Hasta que los estudios y productores no alteren su enfoque en la toma de decisiones y proporcionen una plataforma equitativa para las voces femeninas, el progreso seguirá siendo un espejismo en la pantalla grande.

Los Globos de Oro, como indicadores culturales, reflejan esta realidad compleja. Aunque Gerwig ha sido nominada en tres ocasiones al Oscar, hoy se encuentra envuelta en la controversia en torno a “Barbie” y su clasificación para dichos premios ya que fue incluida en la categoría “guión adaptado” y no “guión original”.

Esta prenominación destaca las complejidades y a veces contradicciones en la evaluación de películas dirigidas por mujeres. En su cuenta de twitter Judd Apatow critica esta decisión argumentando que esto puede afectar significativamente las oportunidades y reconocimientos de Gerwing en la temporada de premios. Esto no es sólo una cuestión académica. En guión original, “Barbie” tenía muchas posibilidades de conseguir el oro; en adaptado, se enfrenta a una fila de rivales a mejor película, incluidas Oppenheimer y Killers of the Flower Moon. A un equipo de producción que espera competir por el Oscar a mejor película y mejor director, le dolerá perder su mejor oportunidad de conseguir un trofeo de primera categoría.