Mañana, junto a la CGT, los movimientos sociales peronistas realizarán su primera medida de fuerza contra el gobierno de Javier Milei. De esa manera, comenzaron a definir la relación que de aquí en adelante mantendrán con la administración de La Libertad Avanza. Es la primera marcha de protesta general que la totalidad de las organizaciones que integran la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) realizan en cuatro años.
El Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie, MTE, Corriente Clasista y Combativa (CCC), Frente Popular Darío Santillán y Movimiento Misioneros de Francisco estiman movilizar unos 50.000 militantes. La decisión de acompañar a la CGT en el paro general de 12 horas convocado para exigir “derogar el DNU y la ley ómnibus” que se debate en el Parlamento se decidió a través de una serie de jornadas de asambleas y ollas populares realizadas en todos los distritos del país.
No está prevista una logística especial para el despliegue territorial hasta las inmediaciones del Congreso. No habrá micros, ni llegarán las pancartas en camionetas o camiones. Hasta el momento la decisión es trasladarse en transporte público. La intención es evitar una posible confrontación con las fuerzas de seguridad, tanto federales como de la Ciudad.
Hasta ahora es una incógnita la actitud que tomará Milei si una multitud corta avenidas y calles. ¿Aplicará el Ministerio de Seguridad el Protocolo Antipiquetes? Nadie pone en duda que las organizaciones sindicales que componen la CGT y los movimientos sociales convocarán a decenas de miles de manifestantes para protestar contra el Decreto de Necesidad de Urgencia y la ley ómnibus que proponen, entre otras medidas, una reforma laboral.