¿Imaginan que en el centro de la ciudad existiera un lugar que con solo poner un pie allí te transporte automáticamente a la magia de la niñez? Es real y está montado en la intersección de avenida Sarmiento y Catamarca.

Fantasía sobre hielo” es el nombre del espectáculo que hace dos meses llegó a Tucumán para encandilar a niños y grandes, en medio de luces brillantes, talentosos acróbatas, carismáticos patinadores y los más graciosos payasos.

“Tenemos todas las atracciones de un circo tradicional, con la particularidad de que toda la producción se realiza sobre una pista de hielo ecológica”, remarcó Francisco Barraco, uno de los responsables del show.

Las vacaciones de invierno regalan el momento perfecto para que conozcan la propuesta quienes aún no tuvieron la oportunidad o para que repitan la experiencia aquellos que ya la disfrutaron, con una ventaja que combate las heladas temperaturas de la provincia: su carpa está calefaccionada.

Un camino de ida

Una alfombra roja que se vuelve azul es el camino de entrada a un lugar que reluce por donde se lo mire. En el ingreso no tan solo se colocó una escenografía perfecta para que lo más chicos se tomen fotos de recuerdo; también hay un colorido candy bar lleno de golosinas, un puesto de pochoclos y a su lado, una máquina de algodón de azúcar.

Juguetes de recuerdos, globos led y otros con el rostro de varios personajes de Disney, también se ofrecen en el pasillo donde la magia comienza, y todo eso antes de llegar a la butaca asignada.

“¡Qué lindas luces mamá!”; “¿me puedo sacar una foto ahí?”; “¡Ahí está Elsa!”, se escucha decir a los niños que empiezan a entrar en ambiente desde temprano y quedan sorprendidos.

Acción

Una vez que todos asistentes están ubicados en sus respectivos asientos, el show se abre paso con Woofy, el Pato Donald, Minnie y Mickey a la cabeza, quienes luego de un arranque lleno de risas dejan el espacio a musicales con artistas y acróbatas que recorren veloces el hielo con sus botas con filo.

“Contamos con un gran elenco de patinadores”, resaltó Francisco y adelantó que todos los niños van a poder disfrutar sobre el escenario con los personajes de Aladín, Coco, la Bella y la Bestia, el musical de Encanto, las princesas de Frozen...

“Es un espectáculo para todos los gustos y todas las edades porque también hay cuadros al estilo music hall, con piedras y plumas”, relató sobre la puesta en escena que dura casi dos horas.

Si se mira con atención, hay un factor común en todos lo que asisten al espectáculo y es que no pueden dejar de sonreír desde que la acción comienza hasta que se termina.

Y uno de los responsables de esa alegría que no se puede disimular es León, un niño de solo nueve años que participa como payaso en uno de los números. “Me gusta hacer reír a la gente. Mi momento favorito son sus aplausos, que se diviertan conmigo”, afirmó el pequeño que se muestra muy desenvuelto para su corta edad.

Subido a un monociclo, su colaboración junto a otro de los actores provoca carcajadas de todo el público, pero además sorpresa ya que es quien anuncia un sorteo para los presentes e indica las reglas a seguir para todos los que quieran participar. Porque además de música y arte, adentro de la enorme carpa también hay suerte y regalos.

Otras performances

En la función de ayer, las contorsionistas dejaron sin aliento a niños y adultos durante sus presentaciones. Las hicieron sobre el suelo, en aros y en el aire como si fueran hadas que volaban con sus trajes brillantes.

Además, el genio de Aladín con su enorme sonrisa y la pegadiza canción grabada en la memoria de todos quienes aman el filme original, se llevó muchos de los aplausos al igual que su acompañante que realizó malabares y asombró a un público que se mostró encantado con su demostración.

En plena Copa América, también hubo lugar para una escena con el fútbol como eje y una pelota gigante que tocó las manos de varios chicos y grandes que se encontraban en sus sillas.

Asimismo, hubo emoción con las canciones mexicanas de Coco y sus personajes bien caracterizados, que bajaron un poco del cielo a la tierra durante los minutos que duró ese cuadro.

Tampoco se puede dejar de lado el momento de romance, bajo una luz tenue y la melodía de las canciones de la Bella y la Bestia, que enternecieron a más de un asistente en el lugar.

Receso invernal

“Apostamos fuerte a estas dos semanas de vacaciones porque suelen ser las que mayor concurrencia tienen”, comentó Barraco; ayer la capacidad estaba casi cubierta en su primera función.

“Llegamos hace casi dos meses en Tucumán y estamos muy contentos con la respuesta de la gente. Es un récord de estadía aquí en la capital, porque aunque es la primera vez que llegamos con este show,  con la productora antes habíamos pasado por aquí con otros formatos. Porque pensamos en la cantidad de personas que pueden venir, les sugerimos a las  familias que saque las entradas con tiempo”, aconsejó el organizador.

“Nosotros abrimos las boleterías todos los días de este receso invernal a las 10 de la mañana, así el público se asegura su lugar y no necesita hacer filas en la previa de las funciones”, agregó.

En este punto hay que mencionar que con CLUB LA GACETA, hay promoción 2x1 hasta el 31 de este mes inclusive.

Para que nadie se quede afuera, las funciones se multiplicaron y de lunes a jueves hay dos shows, a las 15.30 y a las 18; mientras que viernes, sábados y domingo se agrega una presentación más a las 21, para aquellos que aún trabajan o prefieren las salidas nocturnas.

Otro plus es que cuenta con un estacionamiento privado que siempre está custodiado y una pista de patinaje ecológica que se colocó en la entrada al lugar. La misma está abierta al público, con patines incluidos, por un costo extra.

Toda una experiencia completa que como su nombre indica, está llena de fantasía e ilusión.