Este alimento ha sido considerado por la ONU como uno de los ingredientes con mayor potencial alimenticio debido a sus propiedades nutritivas. Se trata del amaranto, un pseudocereal que se ha puesto de moda por sus ventajas que potencian el bienestar.
Las semillas que ayudan a reducir los niveles de triglicéridos en sangre y previenen el colesterol altoHace más de 7000 años el amaranto era cultivado por nuestros ancestros. En el proceso esta costumbre fue prohibida por los colonizadores, ya que las culturas Mayas y Aztecas lo utilizaban para venerar a sus dioses. Tiempo más tarde el cultivo se extendió a una gran parte de América del Sur y países como la India, China, Rusia, Alemania y Norteamérica.
¿Cuáles son las propiedades nutricionales del amaranto?
El amaranto puede llegar a ser una planta bastante alta, con hojas grandes y anchas. Dentro de sus flores se encuentran sus semillas que son consideradas por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) como uno de los mejores alimentos de origen vegetal debido a su cantidad de nutrientes. Esto se ve reflejado en la decisión de la NASA de cultivar este pseudocereal para proporcionar oxígeno, alimento y agua a los astronautas.
Entre sus propiedades nutricionales se encuentra su alto contenido en hierro y proteínas, aportando todos los aminoácidos esenciales. A la vez aporta el doble de calcio que la leche, es rico en magnesio, vitaminas como la A, B, C, B1, B2, B3, D y K así como es una gran fuente de fibras. Todos estos valores han llevado a que el amaranto sea considerado un pseudocereal, elevándolo de la categoría de grano.
¿En qué comidas se puede agregar este pseudo cereal?
Los beneficios de consumir amaranto son múltiples y esto va desde su aporte en hidratos de carbono y fibra que ayudan a mantener un nivel constante de glucosa en la sangre, conveniente para las personas que padecen diabetes. A la vez es un antioxidante natural que ayuda a combatir el envejecimiento prematuro de las células. Este también mejora el rendimiento físico y mental y ayuda a reducir el colesterol así como prevenir la presión arterial alta.
El amaranto puede incorporarse a una gran cantidad de comidas, que van desde preparaciones dulces y saladas. Puede ser tostado, inflado o hervido para añadir a guisos, sopas, ensaladas, guarniciones y bebidas. Es perfecto para formar masas de hamburguesas y albóndigas vegetarianas y veganas, y se incorpora en muchas recetas dulces. Además no contiene gluten por lo que puede incorporarse en recetas aptas para personas con intolerancia a esta proteína.