La posibilidad de la eterna juventud está al alcance de la mano. Con un nuevo producto, la vida de cualquier persona mejoraría sustancialmente. ¿Alguna vez has soñado una versión mejor de ti misma? Entonces, debes probarlo para generar tu otra que será más joven, más bella, más perfecta. Solo tienes que compartir tu tiempo con esta nueva figura. Una semana para ti; otra semana para ella en un equilibrio perfecto de siete días. Parece fácil. Solo es necesario seguir las instrucciones. Claro que es inevitable pensar en las contraindicaciones. ¿Qué podría salir mal?

Este es el argumento sobre el que juega “La sustancia”, la propuesta que vincula el terror con el drama psicológico al empujar a los personajes a terrenos impensados inicialmente, y de los cuales parece imposible salir indemne.

Hay una referencia innevitablemente interesante que invita desde el elenco. Demi Moore es la encargada de componer a Elisabeth Sparkle, una consagrada actriz ganadora del Oscar, con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y con programa propio de ejercicios en la televisión. Pero con más de 50 años, siente que el final de su carrera está próximo y que será pronto reemplazada por alguien menor. Esa es la idea que anida en la cabeza del ejecutivo del canal de televisión que la tiene al aire, interpretado por Dennis Quaid. Mientras se repone de un brutal accidente, Sparkle se entera de que si se inyecta “La sustancia” podrá seguir vigente transmutada en otra persona, la bella, potente y juvenil Sue, a cargo de Margaret Qualley. Lo único que debe respetarse para que todo salga bien es la obligación de cambiar de cuerpo cada semana.

Ellos forman el triángulo central de la historia dirigida por Coralie Fargeat, con una mirada de corte feminista sobre los cuerpos, su importancia y los condicionamientos sociales, con un elenco que completan Hugo Diego García, Phillip Schurer, Joseph Balderrama, Oscar Lesage, Gore Abrams y Magtthew Géczy.

Como precedente de la repercusión, la trama (en la que abundan escenas sangrientas y con cuerpos desnudos) ganó los premios al mejor guión en el festival de Cannes (el jurado lo presidió Greta Gerwig) y del Público de la sección Midnight Madness en el de Toronto, además de haber colmado las salas de proyección de quienes disfrutan de una estética cercana al gore (con una buena dosis de humor negro) más allá de la consideración de los críticos. Luego de su paso por la pantalla grande, llegará a la plataforma Mubi, reservada al cine de autor.

La francesa Fargeat realizó previamente “Venganza”, una producción premiada en numerosos festivales independientes, y tiene como sus referentes en la industria a David Cronenberg, John Carpenter, David Lynch y Michael Haneke. Del primero es evidente la influencia de varios elementos del género del terror que llegan en la nueva producción.