Atlético Tucumán viene demostrando a lo largo de los últimos campeonatos que es un equipo mucho más sólido cuando juega en su estadio, el José Fierro, que cuando lo hace en condición de visitante. Esta fortaleza en casa no solo le ha permitido sumar puntos valiosos, sino también ilusionar a sus hinchas con la posibilidad de clasificar a torneos internacionales.

Una de las razones más claras para el buen rendimiento en casa es el factor emocional que genera jugar frente a su gente. La hinchada del “Decano” es conocida por su fervor y apoyo incondicional, lo que crea un ambiente intimidante para los rivales. Ojo, a veces esa presión que sienten los equipos visitantes dentro del Monumental actúa como un “jugador extra”, pero también condiciona a los propios jugadores “decanos”, sobre todo cuando las cosas no marchan bien. Aunque según las estadísticas, esa presión se refleja en el desempeño del equipo dentro de la cancha.

El conocimiento del campo de juego también juega un rol fundamental. Atlético está completamente adaptado a las dimensiones, el estado del césped y las condiciones de su estadio, lo que le permite desarrollar su estilo de juego con mayor fluidez. Los jugadores conocen a la perfección los espacios y cómo sacar ventaja de las características del terreno, que en los últimos meses se mostró mucho mejor, gracias al trabajo de Walter Aciar.

Otro aspecto clave es el planteo táctico que Atlético adopta cuando juega en su casa. El equipo suele ser más agresivo buscando siempre el arco rival desde el inicio. Este enfoque ofensivo suele darle frutos, ya que con la posesión de la pelota y la presión alta, logra asfixiar a los equipos rivales. De esta manera esa presión muchas veces se impone por sobre cualquier planteo táctico que intente proponer el rival.

 En tanto, cuando juega de visitante, el equipo adopta un planteo más conservador (aunque en los últimos partidos repitiendo el equipo titular), priorizando no recibir goles y siendo más cauteloso, lo que a veces se traduce en falta de contundencia para cerrar los partidos. Ejemplo claro de ello es la derrota 1-0 frente a Rosario Central, en un partido que dio la sensación que si aceleraba, el “Decano” lo ganaba.

Aunque en menor medida, las condiciones climáticas -sobre todo a partir de septiembre y hasta marzo- de la región, con temperaturas y niveles de humedad que no son comunes para los equipos de otras provincias, pueden ser una ventaja adicional para el “Decano”.

Tomando en cuenta los últimos cuatro torneos: Copa de la Liga Profesional 2023, Copa de la Liga 2024, Copa Argentina y Liga Profesional 2024 (en curso) el “Decano” jugó 43 partidos, de los cuales dos fueron en estadio neutral (uno ganado y uno perdido), 20 en Tucumán y 21 en rodeo ajeno.

Jugando afuera sumó 17 puntos de 63 posibles, producto de tres triunfos, ocho empates y 11 derrotas. Es decir que cosechó el 26,9% de los puntos, en promedio si se compara con la actualidad de otros equipos.

El cálculo matemático cambia radicalmente cuando se analizan los partidos de local. Allí el “Decano” consiguió 35 puntos de 60 en juego, es decir el 58,3%. Si bien el número visto en porcentajes no es abrumador, la sumatoria está compuesta por nueve triunfos, ocho empates y apenas tres derrotas. Lo que convierte a esta racha en altamente positiva.

Sin ir más lejos, 17 puntos de los 25 que ostenta en la Liga Profesional fueron conseguidos en el Monumental; en ese rubro el “Decano” es el tercer mejor equipo, por debajo de Deportivo Riestra (21 en ocho partidos jugados en casa) y River (18 puntos con cinco triunfos y tres empates jugando en Núñez).

La importancia de sostener este nivel de fortaleza en casa será vital para la institución de 25 de Mayo y Chile, el equipo y los hinchas sueñan con clasificar a torneos internacionales como la Copa Libertadores o la Copa Sudamericana. En campeonatos tan competitivos y largos como la Liga Profesional, sumar puntos en casa es casi una obligación para mantenerse en la pelea y base de esos triunfos, la ilusión continúa intacta.

Desde aquí y hasta que termine el torneo, el “Decano” tiene que disputar 14 partidos, de los cuales siete serán en su fortaleza, el Monumental: Belgrano, Tigre, Lanús, Sarmiento, Huracán, Newell’s y Central Córdoba. Por su parte, los juegos con Argentinos, Riestra, Godoy Cruz, Unión, Gimnasia e Independiente los disputará lejos de Tucumán. Estos 42 puntos definirán el destino internacional -o no- para el 2025.