Los cometas siempre llamaron la atención y causaron temor, probablemente, por su cola, que sólo se observa en estos objetos.

El más conocido es el Cometa Halley que fue visible en 1910 y en 1986. Fue observado desde el año 240 AC. Lo hicieron los chinos, los babilonios y europeos medievales, aunque no sabían qué se trataba del mismo objeto. Edmund Halley descubrió que era periódico en 1705 y calculó su periodo. En la pasada a principios del siglo XX mucha gente se suicidaba porque se predecían todo tipos de catástrofes. La última vez fue difícil verlo a simple vista y su cola no se veía ni con pequeños telescopios. Hubo una gran campaña de observación. Los observatorios abrieron sus puertas para que todos pudieran verlo.

Los cometas forman parte del grupo de los cuerpos menores del Sistema Solar (Según la definición de la Unión Astronómica Internacional). Son objetos compuestos de polvo, rocas y partículas de hielo. El hielo es agua, dióxido carbono, hidrógeno, entre otros compuestos. Se forman en la Nube de Oort que es una esfera de material que rodea al Sistema Solar. Tienen núcleo sólido y alrededor de él una coma, que es como una nube de polvo y gases volátiles, que hace que se lo vea como un objeto difuso. Al acercarse al Sol, por las altas temperaturas, el hielo se sublima y se desarrolla la cola, que es el material que se ha vaporizado y va dejando a su paso.  En realidad tienen dos colas, una de material que va quedando en el camino seguido por el cometa y una de partículas que son arrancadas por el viento solar. La cola de partículas no siempre es visible.

Ahora se anuncia la presencia del cometa C/2023 A3 (Tsuchinshan-ATLAS) que fue descubierto en el Observatorio Tsuchinshan en China en enero de 2023 y de manera independiente por el observatorio robótico ATLAS en Sudáfrica en febrero de ese mismo año. Este cometa ya está visible en el hemisferio sur y puede vérselo hacia el este poco antes del amanecer.

Los cometas llevan el nombre de los descubridores. Este cometa fue reportado por los observatorios Tsuchinshan y Atlas por eso se asigna a ambos su descubrimiento. Posteriormente se lo detectó en imágenes del Zwicky Transient Facility del Observatorio de Monte Palomar en California tomadas en 2022. También se les asigna un código, en este caso C/2023 A3. C/ significa que es un cometa no periódico, 2023 es el año del descubrimiento y A3 el orden en que se descubrió.

Todos los años se descubren gran cantidad de cometas y asteroides. Hay telescopios robóticos dedicados a observar todo el cielo de manera permanente, como ATLAS, con los que se descubren muchos de estos objetos. Pero también se descubren con telescopios espaciales y telescopios en Tierra. Los aficionados hacen un gran aporte al descubrimiento de cometas.

Muchos pasan cerca de la Tierra pero no es posible verlos a simple vista o con pequeños telescopios. El estudio de los cometas puede dar información sobre los orígenes del Sistema Solar. Hace tiempo se enviaron sondas a orbitar alrededor de ellos  y observarlos de cerca, incluso alguna impactó sobre la superficie.

El cometa C/2023 A3 (Tsuchinshan-Atlas), que se anuncia como el cometa del siglo, en algunos lugares oscuros y con cielos limpios será visible a simple vista, pero para disfrutar de su cola hay que usar binoculares o telescopios. En nuestra provincia será difícil observarlo debido a la alta contaminación que hay. En la zona noreste y en los Valles Calchaquíes serían las más apropiadas para observarlo.

Sin dudas es una gran experiencia observar un cometa, pero aunque muchos no puedan hacerlo, dará información sobre el origen del Sistema Solar, porque hay telescopios que están recolectando información.