El camino a la final de la Primera Nacional estuvo lleno de méritos para San Martín de Tucumán, y uno de los más destacados es la capacidad del equipo para mantener su estructura intacta independientemente de los cambios en la formación.

Eso quedó demostrado en la victoria contra Alvarado. En el José María Minella, Diego Flores le dio rodaje a futbolistas que no venían sumando muchos minutos. Lejos de salirle mal el plan, éstos rindieron con la misma intensidad y responsabilidad que los habituales titulares; una cohesión y entrega colectiva que le permitió al “Santo” no sólo mantenerse firme en la cima, sino también salir victorioso otra vez.

“Hay muchos jugadores que nos cito y que se merecen estar. La competencia interna es buena y eso nos da tranquilidad”, había declarado Flores en la previa al empate contra el “Santo” sanjuniano de la primera rueda.

Hace unas semanas, en un mano a mano con LA GACETA, Flores había resaltado este mérito. “Siempre digo que yo no estuve en el armado del grupo porque considero que al grupo lo hemos armado entre todos. Hubo momentos en que a algunos no les tocó jugar como a Gonzalo Rodríguez o Pablo Hernández. Pero siempre han estado transmitiendo valores. Todos saben que hay que empujar de la misma manera”, analizó el DT.

Entre los más efectivos de los habituales relevos aparecen Nicolás Moreno y Gonzalo Klusener.

“Chuny”, con tan sólo dos titularidades, se volvió el segundo máximo goleador del “Santo” en el torneo. Los cinco tantos que lleva se dieron saltando desde el banco, y el más importante se dio contra San Martín de San Juan, en el duelo de líderes en La Ciudadela.

“Kluse”, en tanto, supera por un partido a Moreno en el “11”, pero lleva menos ingresos (23). Le marcó a Patronato y deleitó a los fanáticos con dos goles agónicos contra Deportivo Maipú y Guillermo Brown de Puerto Madryn.

Pero San Martín tuvo otros ingresos explosivos. Quizás el más llamativo fue el de Franco Herrera. La suspensión de Darío Sand en Resistencia obligó al DT a mover las piezas y el arquero de 21 años cumplió con la tarea. Contra Arsenal, con varias tapadas, aportó en el 1-1.

Y en el triunfo en Mar del Plata, Flores le entregó la titularidad a Ulises Vera, una de las gratas sorpresas de la temporada.  El oriundo de barrio 20 de Junio ocupó el lugar del suspendido Lautaro Fedele y generó la jugada que culminó en la apertura del marcador. Además, ya había aportado lo suyo al ingresar contra All Boys (allí también se dio la conexión goleadora con Iván Molinas), en el triunfo contra Patronato en Paraná y en el empate contra Racing de Córdoba, entre otros juegos.

¿Qué otros futbolistas aportaron buenos rendimientos en “La Feliz”? Tiago Peñalba y Axel Bordón. Ambos fueron titulares y disputaron un partido sin sobresaltos; sobre todo el lateral derecho, que inclinó la cancha en ataque como si hubiese jugado desde la primera fecha.

Por su parte, Molinas se volvió a ganar un lugar en el “11” y respondió con su tercer gol en el torneo. El volante, que lleva dos asistencias en el torneo, ya le había marcado a Deportivo Maipú y All Boys.

Si bien Matías Ignacio García, Máximo Levi, Hernández y Guillermo Ferracuti ya jugaron como titulares, son relevos frecuentes y siempre aportan a la estructura.  y otros que alternaron  en el equipo fueron Lautaro Fedele y Rodríguez. “Turbo” le marcó a Estudiantes de Caseros y a Quilmes.

Por su parte, Leonardo Monje volvió contra Alvarado y estuvo cerca de marcar un gol; mientras que Agustín Prokop se encargó de aportar la pausa necesaria para asegurar el triunfo sobre Alvarado.

Claro, no se debe obviar el gran nivel que mostró Alan Cisnero en su debut como profesional contra Patronato y ¿por qué no? los ingresos de los que son habituales titulares.

Matías “Caco” García le cambió la cara al equipo en Floresta y Junior Arias marcó lo que fue la remontada momentánea contra la “Academia cordobesa”.

Flores logró un equilibrio notable en sus dirigidos. En este plantel todos rinden en un nivel parejo, lo que al “Santo” le da un plus de cara a la final por el ascenso.