La mesa de diálogo conformada para destrabar las tensiones internas no funcionó, y en menos de 24 horas se terminó disolviendo tras la ruptura del bloque de diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) en la Cámara de Diputados de la Nación. Denunciando, serias diferencias con la conducción de Rodrigo de Loredo, un total de 12 legisladores conformaron el nuevo bloque Democracia para Siempre. Por el otro lado, el bloque orgánico del partido centenario quedó con 21 integrantes.

Para Pablo Juliano, el presidente de la nueva bancada, los motivos de la separación fueron claros y tuvieron que ver con el posicionamiento del bloque partidario frente al Gobierno nacional. Juliano acusó a De Loredo y a los “radicales libertarios” de hacer “servilismo”, y fundamentó: “Los diputados que decidimos crear un espacio nuevo no vinimos al Congreso para eso”.

Sin conducción

El dirigente bonaerense, cercano a Facundo Manes, consideró que el bloque “estaba roto hace mucho tiempo y sin una conducción” y que el objetivo del nuevo espacio es dejar de discutir “la interna del radicalismo” para discutir “los temas importantes que le importan a los argentinos”.

“Estábamos sinceramente esperanzados en tener otro tipo de respuestas, pero la respuesta del bloque de Rodrigo de Loredo fue contestarnos con fotos. Con una foto abrazados de vuelta al gobierno, tergiversando el momento político, camuflándolo de institucionalidad cuando no lo es. La verdad que crearon una situación que tornaba imposible seguir trabajando de esa manera”, remarcó.

Los radicales que responden a Lousteau y Manes oficializaron el nuevo bloque en Diputados

En esta línea, manifestó que están trabajando “en la construcción de una alternativa, que no caiga ni en el extremo que invita Javier Milei, del populismo de derecha, ni tampoco en el extremo del populismo de izquierda que nos tenía acostumbrado el kirchnerismo hasta el año pasado”. “Ahí, sobre esa base, nosotros vamos a empezar a construir una alternativa”, agregó.

“A mí los que son conquistables por el gobierno, la verdad que me tienen sin cuidado”, disparó Juliano sobre los radicales “con peluca”. Y sumó: “Esa es la estrategia que arma el gobierno. Nosotros queríamos ponerle punto final a la infiltración que había en la marca del radicalismo. Hay tipos que tenían su jefatura política en Patricia Bullrich y no se terminan de hacer cargo”.

Entre los radicales “con peluca” (como denominan los integrantes del nuevo espacio a sus excompañeros) se mantienen los dos representantes tucumanos Roberto Sánchez y Mariano Campero.