Cinco décimas. ¿Qué se puede hacer en cinco décimas? En la F-1, por ejemplo, se puede ganar una posición, que es la que le faltó a Franco Colapinto para superar la Qualy 1 del Gran Premio Ciudad de México. Ese casi imperceptible lapso de tiempo decide cosas importantes en una categoría muy pareja, al menos en los puestos de mitad de pelotón. Qué más da. En una pista como la del autódromo “Hermanos Rodríguez”, de poca adherencia y que lleva a que la parte trasera de los autos pierde mucha carga, el bonaerense hizo el 16° tiempo, y ese será el puesto que tendrá en la final del domingo. El español Carlos Sainz (Ferrari) hizo la pole, con el neerlandés Max Verstappen (Red Bull) y el británico Lando Norris (McLaren) atrás.

Luciendo el casco en homenaje al recordado Carlos Reutemann y con un Williams pintado ahora de azul y amarillo, la clasificación dejó frustrado a Franco. “Un desastre el auto. Se hicieron cambios en la puesta a punto, no tenía agarre y tenía un problema al doblar. Ahora sólo queda pelear en la final”, fue la autocrítica del piloto que había logrado el puesto 13 en el tercer entrenamiento del sábado.

Vale entender que en la F-1 nadie tiene asegurado nada en una clasificación. Sino vean lo que pasó con el australiano Oscar Piastri y con el mexicano Sergio Pérez, que tampoco pudieron superar la Q1 siendo que manejan autos de punta (McLaren y Red Bull, respectivamente) e incluso largarán atrás de Colapinto.

Sacando de lado la acción en la pista, el bonaerense se encontró en México con un ambiente cargado de cariño de parte del público, con una creciente atención mediática internacional y con rumores de todo tipo en los pits. Su futuro, relacionado a la temporada 2025, es motivo de especulación. Hasta ya se está diciendo que Red Bull le acercó una oferta para que se sume a su estructura. Sólo el tiempo será testigo si el “oleaje” de situaciones y negociaciones decantan a favor de Franco. Esto, mientras el jefe de Williams lo sigue llenando de elogios: “No es usual que un joven de 21 años tenga la performance que él tiene. Sabíamos que era veloz, así lo mostraba en el simulador, pero es fantástico”, dijo James Vowles.

Franco intenta sustraerse de estas versiones y comentarios. “Trato de quedarme en mi burbuja, que es la de piloto”, afirma. Pero la insistencia es amiga de la acción y hasta hubo quienes lo compararon con Lionel Messi por lo que está generando. “No, no me siento ni cerca de Leo. Él está a otro nivel y realmente no puedo creer cuando la gente me compara con él, yo quedo como: ‘¿Qué te pasa?’”, afirma.

Volviendo a la carrera, Colapinto enfrentará otra final complicada, por la posición en la que largará. Ya le sucedió el domingo pasado en Austin, donde partió 15° e hizo uso de una atrevida estrategia de montar neumáticos duros para durar lo más posible antes de la detención en los pits. Las cosas le salieron bien, al concluir 10°. Esta vez, en México, las condiciones de pista son más impredecibles y el Williams no parece estar tan sólido como hace una semana. Desde las 17 del domingo será cuestión de ver qué puede hacer. Algo que, según lo visto en las anteriores cuatro presentaciones, es mucho.