¿El agua ayuda a bajar de peso? Cuándo tomarla para obtener mejores resultados

Reemplazar gaseosas y jugos por agua es una de las maniobras más populares a la hora de bajar de peso. Liberar nuestro cuerpo de los azúcares a través de este líquido inocuo puede ayudar a reducir el peso corporal. Sin embargo ¿en qué momento del día es más beneficioso para nuestra salud tomar agua?

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Existen personas que no pueden realizar un almuerzo o cena sin acompañar cada bocado con un trago de agua, mientras que otras prefieren esperar al final de esta. Otras incluso pueden anticiparse a las comidas para hidratarse, con el argumento de facilitar el descenso de peso, mientras que el consumo posterior es considerado una ayuda a la digestión.

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Tomar agua antes o después, ¿cuál es mejor para digerir los alimentos

Sabemos con profunda claridad que en nuestro día a día debemos beber dos litros de agua, según la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se traduce en ocho vasos por día. Y aunque este dato es ya sabido, las dudas surgen a la hora de disponer estos consumos de líquido y cómo repartirlos durante el día, teniendo en cuenta las distintas comidas.

Con respecto a la duda de tomar agua antes del almuerzo o cena o después de estos eventos, la Clínica Mayo de los Estados Unidos elabora una respuesta. “No existen motivos para pensar que el agua diluya los jugos digestivos o interfiera con la digestión. De hecho, tomar agua durante o después de una comida ayuda a que el cuerpo descomponga y procese los alimentos”, expresa la entidad médica.

Tomar agua después de comer, la forma más efectiva para beneficiar los procesos digestivos

Así es que el agua puede ayudar a descomponer los alimentos para que el cuerpo pueda absorber los nutrientes, favoreciendo la digestión. A su vez, según indica la institución médica puede ablandar las heces, previniendo el estreñimiento. Sin embargo, tomar agua antes de las comidas, no parece tener ningún efecto en el proceso digestivo, por lo que no puede considerarse negativo o positivo.

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Acerca del consumo posterior de agua, luego de almuerzos o cenas, algunos especialistas recomiendan incluso, tomar agua una hora después de cada comida, siempre como una ayuda para la digestión de los alimentos.

Entre otros de los beneficios de beber agua para disminuir el peso corporal, se encuentran la supresión del apetito, ya que el agua puede ocupar nuestro estómago limitando el hambre, a su vez que acelera el metabolismo, lo que a la larga, junto con el ejercicio regular, hace que el descenso de peso sea más fácil y eficaz, contribuyendo a la pérdida de grasa.