Para que un menor pueda viajar al exterior, estimaron que el trámite puede llegar a costar alrededor de $200.000 (incluye gastos de legalizaciones, apostillados y honorarios, entre otros). Aunque todo depende de cada profesional, aclararon.
Los escribanos suelen encontrarse con muchas realidades. En general, es un trámite que suelen hacer los padres que están separados. Cuando los progenitores se llevan bien, es común que ambos firmen un permiso válido hasta la mayoría de edad para que los hijos en común puedan salir del país con uno o con otro, a cualquier destino. Aunque también está contemplada la opción de realizar permisos limitados. Por ejemplo, para un único viaje a un país puntual o sólo por un tiempo acotado. Es posible incluir a varios hijos con el mismo costo, así como identificar si podrán viajar al exterior solos o con qué personas.
Los profesionales aclaran que, en cualquier momento, alguno de los firmantes puede arrepentirse y hacer una gestión para revocar el permiso dado.
“Un escribano brinda un asesoramiento integral a los padres sobre la implicancia y el alcance de estas autorizaciones, siempre teniendo en cuenta las particularidades de cada familia. No hay una recomendación generalizada. A veces dar un permiso en forma permanente, en algunos casos, puede ser un arma de doble filo y uno de los papás se lo termina llevando al chico. Es algo que deben analizar bien los papás y decidirlo”, explica la escribana Roxana Martín de Muñoz. También comentó que en algunos casos las autorizaciones se hacen por vía judicial en algunos casos complicados, cuando por ejemplo el padre no aparece, se niega terminantemente a un viaje sin justificación o tiene revocada la responsabilidad parental por distintas cuestiones.
¿Qué cosas se necesitan para el trámite? El acta de nacimiento actualizada, DNI del padre que autoriza y del menor. En el caso que viajen solos los menores, los DNI de los dos progenitores y del chico. En los casos en que les han quitado la responsabilidad parental, hay que adjuntar la sentencia.