Finalizado el último partido del año, un deslucido empate sin goles contra Independiente en La Bombonera que dejó silbidos en el aire, Fernando Gago no esquivó las preguntas sobre refuerzos. En conferencia de prensa, el entrenador anticipó: “En estos 15 o 20 días se van a entretener con las incorporaciones”, dejando en claro que el mercado de pases será clave para Boca Juniors.

De inmediato, el club oficializó la llegada de su primer refuerzo: el delantero chileno Carlos Palacios. Con un 2025 agitado por delante, el Consejo de Fútbol actuó con rapidez para sumar talento al plantel. Sin embargo, una de las grandes incertidumbres gira en torno al arco: Sergio Romero y Leandro Brey alternaron titularidad, pero ninguno logró convencer a Gago. Javier García, por su parte, ya anunció su salida de la institución.

“Chiquito” Romero atraviesa un momento complicado debido a su rendimiento irregular y una lesión en la rodilla que le impidió estar presente en los últimos partidos. Además, el ex Manchester United no pudo dejar atrás el episodio con un plateísta tras la derrota en el Superclásico ante River. En tanto, Brey, a pesar de ser considerado una promesa a futuro, mostró falencias en partidos clave que despertaron dudas en el cuerpo técnico sobre su continuidad como titular.

La salida de García, despedido en redes por compañeros como Marcos Rojo y Luis Advíncula, obliga a Boca a salir al mercado en busca de un arquero de jerarquía. Entre los principales candidatos aparecen Guido Herrera (Talleres), Rodrigo Rey (Independiente), Washington Aguerre (Peñarol) y Nahuel Losada (Lanús). Herrera, destacado por su buen juego con los pies, y Rey, pieza clave en Avellaneda, lideran la lista. Aguerre podría llegar en condición de libre a partir de enero, mientras que Losada, aunque relegado, también es una opción.

¿Cómo sigue la actividad para Boca Juniors?

Fernando Gago otorgó al plantel un receso de 19 días, con regreso pactado para el 3 de enero en Ezeiza. Tras un año caótico, el entrenador diagramó una pretemporada enfocada en mejorar el estado físico, con trabajos intensivos que buscarán optimizar el rendimiento del equipo de cara a los objetivos inmediatos.

Boca tiene por delante un 2025 exigente. El primer gran desafío será el inicio de la Copa de la Liga el 26 de enero, seguido por el repechaje de la Copa Libertadores a mediados de febrero. En junio, los dirigidos por Gago enfrentarán un reto histórico: el Super Mundial de Clubes, una competencia que exigirá lo mejor del plantel tanto física como futbolísticamente.