El 26 de abril tendrá lugar en Misiones un casamiento que, políticamente, genera altas expectativas. Se trata de la unión de Pedro Puerta, hijo del expresidente Ramón Puerta, con Karen Fiege, protegida política del exgobernador Carlos Rovira. Éste último, considerado el líder misionero desde hace 25 años, está particularmente en las antípodas de Puerta, quien se define como totalmente opositor al mandatario provincial.

El lugar elegido para el evento será un hotel en Puerto Iguazú. Allí, pondrán título a su historia de amor que los une desde hace siete años. Según indicaron, habrá dos ceremonias religiosas y una fiesta con más de 300 invitados. La información se conoció luego de que la pareja enviara las invitaciones y pidió que reserven la fecha de la gala anunciando casamiento, la ciudad en la que se haría y el día preciso: 26 de abril.

Según pudo saber La Voz de Misiones, ambos se conocieron en la red social X (ex Twitter): “Nos conocimos en 2015, bardeándonos por Twitter, y en 2017, él me invitó a tomar algo. Fueron muchas idas y venidas. Éramos muy chicos, ahora estamos en otra etapa de nuestras vidas”, explicó Feige al medio.

La convocatoria enviada por correo electrónico mantiene en secreto el nombre del hotel en el que se desarrollará la velada. Ni los propios invitados saben exactamente a dónde deberán dirigirse (aún). Allí, se realizará no sólo la unión civil, sino dos ceremonias religiosas con “distinto color”: habrá una misa católica y también se hará presente un sheij, es decir, un clérigo de la comunidad islámica. De esta manera, buscarán respetar las tradiciones y orígenes de ambas familias.

El medio misionero también reveló que, entre los ex mandatarios invitados a la boda, no sólo asistirá Ramón Puerta, sino también sus cercanos durante la crisis del 2001: Eduardo Duhalde, Adolfo Rodríguez Saá y también el ex presidente Mauricio Macri, padrino de Pedro y amigo íntimo de la familia.

Un timing extraño para celebrar

El anuncio del matrimonio entre Pedro Puerta y Karen Fiege llega en un momento de alta polarización política, poco después de que la relación entre los Puerta y el oficialismo misionero, liderado por Carlos Rovira, se deteriorara drásticamente.

Este enfrentamiento alcanzó su clímax con el escándalo relacionado con el exdiputado Germán Kiczka, quien ahora se encuentra preso en el penal de Cerro Azul, enfrentando acusaciones por tráfico de MASI (Material de Abuso Sexual Infantil).

Kiczka era Diputado provincial por el partido Activar, el cual está, curiosamente, liderado por Pedro Puerta. Tanto el ex legislador como su hermano están acusados de tenencia y distribución ya que, entre las pruebas provistas por las autoridades a la justicia, se hallaron más 913 archivos de abuso sexual infantil y una denuncia de abuso sexual contra Sebastián.

La boda coincide con una especie de “relanzamiento político” de Puerta, quien intenta despegarse de los hechos que involucran a Kiczka con la pedofilia y abuso sexual. De hecho, el diputado opositor viene ausentándose en las últimas sesiones de la Legislatura y reuniones de comisión, intentando mantener un perfil más bajo.