En 2024 el consumo per cápita de carne bovina, aviar y porcina en Argentina quedó en 115 kilos, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Departamenteo de Agricultura de Estados Unidos (USDA). Pero una tendencia sostiene que el consumo de un nuevo tipo de care podría reducir los daños en las regiones del noreste.

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En promedio, un argentino consume más del doble de carne al año que el promedio mundial. La más elegida, sorprendentemente, no fue la vacuna, sino la aviar, seguida por la de vaca y en tercer lugar la porcina. La carne de búfalo intenta abrirse espacio en el mercado para posicionarse y salvar una amplia e importante región del Paraná.

Propiedades nutricionales de la carne de búfalo

La producción de carne de búfalo representa una alternativa en regiones en las que el cuidado de ganado vacuno tiene dificultades. Este es el caso de regiones como el noreste y el Delta del Paraná, donde los humedales constituyen el ecosistema necesario para la cría del búfalo de agua.

Un equipo del Instituto de Tecnología de Alimentos del INTA Castelar evaluó y determinó las propiedades de la carne de búfalo. El investigador Sebastián Cunzolo destacó la necesidad de tener datos precisos al respecto. "Los resultados del estudio mostraron que las hamburguesas de carne de búfalo tienen un alto contenido de proteínas y bajos niveles de grasa", explicó.

A su vez, señaló que tiene beneficios paralelos por lo que es un alimento "nutricionalmente interesante" con bajo índice aterogénico y de trombogenicidad. Para la observación se utilizaron hamburguesas de carne de búfalo -de 24 a 30 meses de edad- del establecimiento "La Filibertita".

El dueño del establecimieto sostuvo que la carne que se obtiene es similar a la del vacuno tanto en jugosidad como en terneza, pero la diferencia está en que tiene más proteína y hierro, menos grasa y menos colesterol, atributos fundamentales para el consumidor actual.