Prolífico actor, productor, guionista, cantante, compositor y ahora, cocinero de hamburguesas. El currículum de Bradley Cooper no conoce de restricciones. El 12 veces nominado al Oscar ahora incursiona también en la gastronomía y ya ha inaugurado su primer emprendimiento. Cooper abrió su restaurante de “sándwiches filadelfia” y revolucionó a las masas que acudieron desesperadas por probar el nuevo platillo y de pasada por qué no, visitar al actor. 

Con 10 nominaciones al Oscar, vuelve “Wicked” con la historia no contada de las brujas de Oz

Antes de su apertura oficial anunciada para enero de 2025, Bradley Cooper decidió inaugurar su local de “sándwiches filadelfia” el mes pasado. El director de “A Star is Born” se encargó de servir él mismo a sus clientes este entrepanes de carne, cebollas y queso filadelfia en la apertura de Danny & Coop's Cheesesteaks, su nuevo restaurante, justo antes de la Navidad.

Bradley Cooper hizo la apertura preliminar de su restaurante de sándwiches el mes pasado

El actor de Maestro se asoció con Danny DiGiampietro, el propietario de la Angelo's Pizzeria de Filadelfia, para abrir la primera tienda física de su nuevo negocio de comida. El restaurante se encuentra ubicado en el barrio Alphabet City de la ciudad de Nueva York.

Como era de esperar, dado el calibre de la celebridad de Cooper, el destino estuvo abarrotado durante la inauguración a fines de diciembre, con gente sorteando las filas para devorar el único plato del menú, el “Philly cheesesteak”y ver al copropietario en persona.

La euforia no duró tanto: Danny & Coop’s aún permanece cerrado

Esta apertura preliminar tuvo lugar los días 20, 21 y 22 de diciembre del año pasado. El aviso fue publicado en el Instagram de Danny & Coop’s donde aclararon que estarían abiertos todo el fin de semana. Sin embargo, la apertura oficial del negocio de comida de Cooper estaba programada para enero de 2025, aunque aquello aún no sucedió.

A pesar del entusiasmo del comienzo, dos semanas después de que Cooper irrumpiera en el East Village con colas que daban la vuelta a la manzana para probar el “cheesteak”, el local físico sigue cerrado. Fuera de la tienda hacen evidencia de la falta de actividad un par de botes de basura y un cartel que ocupa la estrecha fachada de la Avenida A.