Ringo Starr acaba de lanzar Look Up, su primer disco de música country, en colaboración con el reconocido productor T-Bone Burnett. Para promocionarlo, el ex integrante de los Beatles se paseó por varios programas británicos y estadounidenses. Uno de ellos fue el show de Jimmy Kimmel, donde hizo una extraña confesión.
En medio de la charla, reveló que nunca en su vida probó la pizza. Todo empezó cuando, como parte de una dinámica para el programa, Kimmel sacó una lista de rumores sobre Ringo que circulan en Internet para preguntarle si son verdaderos o falsos.
“¿Es cierto que nunca comiste pizza?“, lanzó el conductor y provocó risas entre la audiencia. ”Nunca comí una pizza”, aseguró Starr, lo que sorprendió a todos. “Ni curry”, añadió. Y explicó los motivos: “Soy alérgico a varios alimentos y, la mayoría del tiempo, no sabés lo que le ponen a la pizza. Soy muy estricto conmigo mismo porque me enferma inmediatamente”.
Jimmy aprovechó el momento y bromeó al respecto. “Solía pensar que tenías la mejor vida, pero la mía es mejor”, comentó. “La tuya es mejor porque comiste pizza”, retrucó el músico, sin quedarse atrás. Más adelante, como parte de la dinámica, el ex Beatle también afirmó que es cierto que sabe tejer a crochet. “Aprendí a tejer en el hospital porque estuve ahí por un tiempo, por lo que mandaban gente para mantenernos entretenidos. Yo tenía 13 años”, detalló.
“Un día, una señora entró con maracas, panderetas y pequeños tambores. Ella me dio un tambor y, desde ese momento, todo lo que quería era convertirme en baterista”, añadió. Sin embargo, entre risas, aclaró que ya no recuerda cómo se teje, pero sí lo hizo en el pasado. Para rematar, Kimmel le consultó a Starr por uno de los rumores más insólitos que existen sobre él: “¿Es cierto que sos dueño y manejás un submarino amarillo?”.
Con un tono serio, Ringo respondió: “La verdad es que no puedo hablar de eso”. Pocos segundos después, sonrió y dio a entender que solo se trata de un divertido mito. A continuación, reveló que no inventó completamente su nombre artístico, sino que se inspiró en el que le pusieron los miembros de una pandilla de Liverpool a la que pertenecía cuando era joven. “En vez de llamarme Richard o Richie me decían: ‘Hey, Rings, ¿qué onda?’. Ese fue el inicio del cambio de mi nombre”, señaló. Para cerrar, comentó que eligió su nombre definitivo al participar de su primera banda de rock años más tarde.