Un video grabado en el estrecho de Magallanes se volvió viral al captar el impactante momento en que una ballena jorobada engulló a un joven que se encontraba en el agua, mientras su padre filmaba la escena. Para alivio de todos, el enorme cetáceo finalmente “escupió” a su inesperada víctima.
El hecho ocurrió el sábado pasado en Punta Arenas, Chile, más precisamente en la zona del estrecho de Magallanes. Adrián Simancas practicaba packrafting junto a su padre Dell Simancas, un venezolano de 49 años. Mientras recorrían con su bote el mar, una ballena emergió del agua y se tragó al joven de 24 años junto a su bote.
Senadores piden la interpelación de Patricia Bullrich por los incendios en la PatagoniaFue su padre quien logró mantener la tranquilidad y, una vez que el joven fue escupido por la ballena junto a su barco, le indicó que mantenga la calma.
"Tranquilo, agarra el bote, no te asustes… agárrate de mi bote, vamos a la orilla” gritó Dell mientras su hijo se acercaba a su bote y la ballena se alejaba. Adrián, evidentemente asustado solo agregó: “Pensé que me había tragado”.
¿De qué se alimentan las ballenas jorobadas?
Las ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae) son mamíferos marinos que se alimentan principalmente de krill y pequeños peces. En el hemisferio sur, su dieta se compone mayoritariamente de krill, mientras que en el hemisferio norte consumen cardúmenes de peces como anchoas, bacalao, lanzas de arena y capelán.
Para capturar a sus presas, las ballenas jorobadas emplean una técnica cooperativa conocida como "red de burbujas". Este método consiste en que un grupo de ballenas se sumerge y, siguiendo a una líder, adopta diferentes roles: algunas rodean a los peces moviendo sus aletas para agruparlos, mientras que otra emite un sonido fuerte debajo del banco de peces, provocando que estos asciendan.
Luego, la líder crea una red de burbujas alrededor del banco, atrapando a los peces y permitiendo que las ballenas se lancen desde abajo con la boca abierta para alimentarse.
Esta sofisticada estrategia de alimentación requiere una gran cooperación y coordinación entre las ballenas, y es exclusiva de esta especie. Además, su dieta puede variar según la disponibilidad de presas en diferentes regiones y estaciones del año, lo que demuestra su adaptabilidad a distintos entornos marinos.