Franco Colapinto cerró con una sonrisa su participación en el icónico Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1. Tras haber clasificado en la 18° posición, el piloto argentino completó una sólida carrera: avanzó cinco lugares y terminó en el 13° puesto con su Alpine, en una competencia que dominó el británico Lando Norris (McLaren), seguido por Charles Leclerc (Ferrari) y Oscar Piastri (McLaren).

A pesar de las dificultades iniciales, Colapinto se mostró satisfecho con su rendimiento. “Fue una carrera dura, complicada. Largamos con la goma incorrecta y tuvimos que parar muy temprano. No era lo que esperábamos, pero clasificar 20° y terminar 13° es positivo”, analizó después de completar las 78 vueltas por las estrechas calles de Montecarlo.

"Fue muy aburrido, la carrera fue como salir un domingo a la mañana con la familia a la ruta. A nosotros nos gusta empujar, íbamos muy lentos. Es raro ir tan despacio", disparó el argentino.

El argentino también dejó entrever que hubo estrategias de equipo en juego, especialmente con su compañero Pierre Gasly, cuya carrera terminó prematuramente. “Intenté ayudarlo, pero la estrategia no funcionó. Tuvimos que cambiar la mía sobre la marcha”, explicó.

Más allá del resultado, Colapinto valoró el aprendizaje. “Estoy entendiendo más el auto. Me falta, pero fue un domingo mejor. Saqué buena información para lo que viene. Hay que seguir progresando”, remarcó.

Con este paso firme en uno de los circuitos más exigentes del calendario, Colapinto continúa sumando experiencia y demostrando que está a la altura del desafío de la Fórmula 1.