No son solo un adorno para budines o bizcochuelos: las nueces y almendras son poderosos potenciadores de la salud que, al incorporarse como snack habitual, pueden regular nuestra función cardiovascular, controlar nuestro peso y favorecer el bienestar mental. 

La dieta que previene el envejecimiento del cerebro y ayuda a cuidar la memoria

Su renombrada versatilidad y sabor las convierte en el ingrediente perfecto para potenciar un sinfín de preparaciones. Desde ensaladas y rellenos de pastas hasta platos árabes en el ámbito salado, o helados y chocolates en lo dulce, estos frutos secos siempre dan lugar a combinaciones atractivas.

Los beneficios de las almendras y las nueces para la salud

Pero no es solo su facilidad culinaria lo que los hace un alimento ideal, si no también sus beneficios para la salud. Las nueces y las almendras tienen un alto contenido en ácidos grasos omega-3 y antioxidantes. 

Estos componentes son esenciales para mantener el corazón saludable y reducir la inflamación en el cuerpo. Además, su riqueza en fibra ayuda a mantener el sistema digestivo en buen estado y contribuye a la sensación de saciedad, lo que puede ser de gran ayuda para quienes buscan controlar su peso.

Combinar este alimento con otra preparaciones saludables puede ser un movimiento ventajoso para la salud, potenciando aún más las virtudes de estos frutos secos. Así podemos agregar las almendras a frutas ricas en vitamina C y mejorar la absorción del hierro, mientras que las nueces pueden complementar perfectamente una dieta rica en vegetales de hoja verde, agregando virtudes antioxidantes y antiinflamatorias.

Almendras y nueces, un snack ideal.

Un snack ideal: cómo incorporar los frutos secos a nuestra dieta

Pero aún sin ningún acompañamiento estos alimentos son sumamente ventajosos, así como sencillos de llevar. Por ello se hacen un snack ideal para saciar el hambre en las horas de trabajo o por las tardes cuando estamos en casa y no sabemos qué comer. De esta manera nos mantendremos llenos y energizados hasta la cena.

Sin embargo debemos tener en cuenta que una de las claves para comer estos frutos secos es la moderación. A pesar de ser uno alimento ventajoso para la salud, el comerlos en exceso puede aportar muchas calorías, por lo que es importante ingerirlos en cantidades adecuadas. Un puñado de ellos es la medida ideal para disfrutar de sus virtudes sin caer en una ingesta excesiva.