La Justicia tucumana condenó a tres años de prisión efectiva y a cinco años de inhabilitación para conducir a un chofer de Uber que protagonizó un trágico siniestro vial en la autopista de Circunvalación, a la altura de Octaviano Vera, en abril de este año.

La investigación estuvo a cargo de la Unidad Fiscal de Homicidios I, conducida por el fiscal Pedro León Gallo, y en la audiencia intervino el auxiliar de fiscal Lucas Manuel Maggio.

El caso se remonta al 13 de abril de 2025, alrededor de las 19, cuando el imputado, Abel Ramiro Vélez (46), conducía un automóvil Chery Face gris prestando servicio para la aplicación Uber. Trasladaba como pasajeras a Claudia Marina Mancilla y a sus dos hijas: una niña de nueve años y una bebé de apenas nueve días de vida.

Al incorporarse de manera imprudente y antirreglamentaria a la autopista, el vehículo fue embestido en su lateral izquierdo por una camioneta Toyota Hilux negra. El impacto provocó que el automóvil perdiera estabilidad y volcara transversalmente.

El desenlace fue devastador: la niña de nueve años falleció en el acto; su madre, trasladada al Hospital Padilla, murió poco después por politraumatismos y traumatismo encéfalo craneano; y la bebé, derivada primero al Hospital de Niños y luego al Instituto de Ginecología y Maternidad, falleció el 16 de abril a las 23:35, tras varios días en estado crítico.

La fiscalía consideró a Vélez autor penalmente responsable del delito de homicidio culposo por conducción imprudente y antirreglamentaria de un vehículo con motor, agravado por la pluralidad de víctimas.

Durante el debate también se recordó que el acusado ya tenía antecedentes: el 20 de agosto de 2021 había sido condenado a dos años de prisión en suspenso por desobediencia judicial.

Finalmente, el juez interviniente homologó el acuerdo alcanzado por las partes, que establece la pena de tres años de prisión efectiva y la inhabilitación para conducir durante cinco años.