¿Cuál es el techo de "Belén", la película dirigida por Dolores Fonzi? El piso lo tuvo que experimentar la protagonista real del caso tucumano ya que en 2014 fue condenada por sufrir un aborto espontáneo. Quién la ayudó a levantarse y, porqué no, a sentirse parte del éxito que vive la película ahora mismo fue Soledad Deza, su abogada. 

En ese entonces Deza tomó su caso y se embanderó en una causa que derivó en la libertad de Belén y se transformó en un caso bisagra para la sanción de la Ley del Aborto en 2020. Su papel en la película es interpretado por Fonzi, la propia directora. Desde San Sebastián, en cuyo festival de cine recibió una ovación de seis minutos, Deza le contó a LA GACETA cómo vive este momento junto con otras tucumanas protagonistas de la película, pero delante de cámara: Camila (interpreta a Belén) y Ruth Plaate. Deza responde justo minutos después de que la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas la designara como la representante argentina para competir en los Oscars 2026.

- ¿Cómo creés que conviven en vos el éxito de la película y la situación que tuvo que vivir Belén en todo este proceso?

- Lo vivo con muchísima alegría y a la vez muy en carne viva porque el estreno removió muchas de las vivencias traumáticas del caso. Una chica presa por aborto representó históricamente el miedo en la vida de toda mujer. Y al mismo tiempo me llena de orgullo que su cárcel sea hoy una historia de libertad que pueda servir a otras Belén que estén abandonadas a su suerte en el mundo entero.

- En aquel momento, ¿qué es lo que te hizo dar cuenta de que había que ir hasta el fondo con este caso?

- Me convenció la injusticia tremenda de saber que por ser pobre ella estaba presa. Porque tener una mala defensa, ser blanco de los prejuicios patriarcales y quedar arrumbada dentro de la cárcel dos años sin un juicio no se merece ninguna persona. Pero si además te acusan de un hecho que no es delito, como es un aborto espontáneo, es mucho más cruel.

- ¿Qué te dijeron o qué devoluciones recibiste de la gente, críticos o colegas en España de la película y de tu actuación como abogada en este caso?

- La gente está muy emocionada con la película. Los aplausos en las proyecciones de San Sebastián fueron emocionantes, sostenidos y muy conmovedores. Es una historia que les resulta muy difícil de racionalizar que pasó hace solo 11 años y se sorprenden muchísimo de la inquina judicial de criminalizar emergencias obstétricas. No conciben, acá en Europa, el nivel del crueldad que expresan estos procesos en el pleno siglo XXI.

ACTRICES. Fonzi, que en la película interpreta a Deza y Camila Plaate, que lleva el rol de Belén.

- ¿Cuál es la pregunta, consulta o comentario que más recibiste desde el estreno de la película?

- La palabra que más escuche es “Gracias” y eso muestra que hay una identificación con el caso y con la forma terriblemente injusta que gestionó el poder judicial y el sistema sanitario el pedido de ayuda de Belén. Desde el primer momento dijimos “Belén somos todas”, hay gente que lo entendió enseguida y hay muchísima gente que con la película lo pudo sentir.

- ¿Cómo fue tu participación en la realización de la película?

Estuve a disposición de la productora K&S y de Dolores Fonzi que es la Directora desde el inicio del proyecto. Compartí material cuando lo pidieron, intercambiamos información y fue muy orgánico todo. Belén está muy contenta con la película, y eso es lo que más importa.

- ¿Cómo fue el primer contacto con Dolores Fonzi?

Me contactó por WhatsApp, pero yo la había conocido personalmente cuando se presentó en libro Somos Belén de Ana Correa que es en el que se basa la película. Antes de eso, aunque lo personalmente, ya Dolores había levantado en los Premios Platino el cartel de libertad para Belén en plena lucha en 2016, así que la confianza en su mirada para contar esta historia fue absoluta desde el inicio.

- ¿Qué te genera que Tucumán empiece a ser nombrado en otros países a través de la película y este caso?

- Tucumán ya fue nombrado en muchísimos países en 2016, incluido el Comité de Derechos Humanos de ONU pidió su libertad. Me enorgullece que esta historia se conozca porque puede ayudar a otras mujeres criminalizadas y puede inspirar también una abogacía comunitaria más comprometida.

- ¿La película cambió, intensificó, disminuyó en algo tu sensación sobre el caso?

- La película no, el caso de Belén cambió mi vida. Yo había defendido mujeres criminalizadas por emergencias obstétricas antes de Belén y también lo hice después. Pero ella fue la única que estuvo presa, siento que porque llegué tarde. Yo la conocí el día de su condena. Pero yo aprendí mucho con ella y de ella, y juntas aprendimos que se puede subvertir un sistema diseñado y seteado sin las experiencias de las mujeres. La película lo que hace es amplificar la historia y permitirle a Belén cerrar el capítulo, porque verdaderamente lo que pasa con la gente es que siente que “Todas somos Belén”.

- ¿Qué es lo que te provocó ver la película por primera vez?

- Pudor primero y muchísima esperanza después. Vayan al cine a verla, no es una historia con golpes bajos. Es una historia poderosa, dura, pero con toques de humor. Inspira porque en tiempos en que nos quieren convencer que el individualismo es un destino, la película muestra que resistir los embates de los poderosos aunando fuerzas, es la salida de toda injusticia .