La concejal de Yerba Buena, María Decoud Griet, se expresó este miércoles en contra del nuevo Código de Ordenamiento Urbano aprobado en la última sesión del Concejo Deliberante. La edil, que votó de manera negativa junto a otros cuatro concejales, cuestionó la falta de consenso, el apuro en el tratamiento y la ausencia de estudios técnicos que respalden los cambios.

“Yo no estoy en contra del desarrollo, pero sí de un código que duplica la densidad poblacional sin resolver antes los problemas estructurales que ya sufrimos: falta de agua, cloacas colapsadas, tránsito caótico y afectación ambiental”, señaló a LA GACETA.

Según explicó, el código vigente desde 1994 había sido modificado en 15 ocasiones en la última década para adaptarse a la realidad de la ciudad, mientras que la nueva normativa habilita una mayor concentración poblacional en terrenos ya sobrecargados.

“En Solano Vera aprobamos un proyecto para 226 personas, cuando la calle ya es un caos. Con este código podrían habilitarse más de 400. Yo quiero saber qué vamos a hacer con el agua y el tránsito”, advirtió.

Decoud también criticó que el dictamen final del proyecto, de más de 200 páginas, llegó con modificaciones de último momento y sin la posibilidad de análisis profundo.

ARCHIVO

“Pedí oficialmente el archivo digitalizado para poder trabajar propuestas de mejora y nunca me lo entregaron. Nos dicen que esto va a ordenar la ciudad, pero en realidad lo que hace es favorecer a emprendimientos inmobiliarios sin atender las necesidades de los vecinos”.

La edil puso como ejemplo la imposibilidad de construir un hospital en la zona norte, mientras sí se habilitan miles de nuevas viviendas. “¿Dónde vamos a hacer un hospital en Yerba Buena si el uso del suelo no lo permite? Estamos hablando de una ciudad que puede sumar 70.000 habitantes en esa zona, pero sin infraestructura básica”.

Por último, sostuvo que la aprobación del código fue una decisión apresurada y sin la participación de organismos clave como la Facultad de Arquitectura, Urbanismo o Recursos Hídricos de la provincia:

“Acá faltó diálogo y apertura. Se nos dijo que con este código se acabarían las excepciones, pero hay problemas concretos, como el de los pequeños emprendedores que no pueden habilitar un simple alero. Eso tampoco está resuelto”.

El proyecto se aprobó con empate en la votación y el desempate del presidente del cuerpo, alineado con el oficialismo. Para Decoud, el resultado refleja la falta de consenso en un tema que, asegura, definirá el futuro urbanístico de Yerba Buena durante los próximos 15 años.