Detrás de las luces, las transmisiones y el cartel de “WTA 125”, hubo una carrera contra el tiempo. El torneo, que coloca por primera vez a Tucumán en el mapa del circuito mayor, también servirá como escenario de reencuentros. La mayoría de las jugadoras argentinas que llegarán a la provincia ya pasaron por estas canchas. Algunas lo hicieron cuando todavía eran adolescentes; otras, cuando buscaban recuperar su nivel. En cada caso, hay una historia que vuelve a empezar.

La marplatense Solana Sierra será la primera preclasificada y la gran atracción. A los 21 años, vive su mejor temporada: se metió entre las 100 mejores del ranking mundial (67°), ganó 44 partidos y alcanzó la cuarta ronda de Wimbledon, un resultado histórico para el tenis argentino femenino. En Tucumán, su camino empezó mucho antes. Jugó seis torneos ITF y una serie de Billie Jean King Cup. En 2022 alcanzó semifinales y cuartos de final en distintos W25; en 2023 levantó un título en Lawn Tennis y el año pasado conquistó un W50, el más importante de su carrera hasta ese momento. Su récord provincial es de 14 triunfos y 4 derrotas. La primera vez que vino a nuestra provincia tenía 17 años y estaba fuera del top 800. Ahora volverá convertida en una de las grandes promesas del continente.

Ormachea

La otra gran protagonista del cuadro será Paula Ormaechea, que regresa con una historia distinta pero igual de fuerte. La sunchalense, que llegó a ser 59° del mundo, fue la gran figura de los torneos que se jugaron en Tucumán en 2022. Aquella temporada fue finalista y semifinalista de los dos primeros W25, y más tarde campeona del certamen de octubre. Ese título tuvo un valor especial; llegó meses después del fallecimiento de su padre, con quien había compartido su última gira en la provincia. También disputó la serie de Billie Jean King Cup ante Brasil, donde le ganó a Laura Pigossi. Su regreso se da tras un período complicado por lesiones y con ranking protegido (actualmente figura 1.291°), pero la historia la respalda. En Tucumán suma 12 victorias y 3 derrotas, y cada vez que jugó, dejó su marca.

Desde Pergamino, Julia Riera (184°) llega con perfil de regularidad y una temporada en ascenso. En 2025 ganó 24 partidos y logró ingresar a cuadros principales de torneos WTA y Grand Slams. En Tucumán ya jugó seis certámenes y fue parte del equipo argentino de la BJK Cup, aunque sin llegar a competir. Su primera participación fue con derrota ante Ormaechea, cuando todavía no estaba entre las 600 mejores. Desde entonces, nunca volvió a caer antes de cuartos de final. Acumula 10 triunfos y 6 derrotas en la provincia, y buscará superar esa barrera en el torneo más importante que se haya disputado en la región.

Otra que volverá a sentirse local es Martina Capurro Taborda, actual 428° del ranking mundial. Será una de las invitadas al cuadro principal del Tucumán Open. En los últimos años participó de todos los torneos internacionales que se jugaron en Lawn Tennis: los cinco W25 y el W50. En tres ocasiones llegó a semifinales, con un total de 11 victorias en suelo tucumano. Su 2025 también fue consistente, con 35 triunfos y 14 derrotas, la mayoría en el circuito ITF. Su crecimiento la posiciona como una candidata a dar un golpe en casa.

Lourdes Carlé (127°) volverá a Tucumán después de tres años. En 2022 disputó los dos W25 iniciales, con derrotas tempranas, pero se fue con una alegría: ganó el título de dobles junto a Julieta Estable en Las Lomitas. En 2025 su balance fue de 30 victorias y 28 derrotas, y se mantiene cerca del top 100, con el objetivo de afianzarse definitivamente en el circuito mayor. Su regreso al norte será también una oportunidad para sumar puntos en una etapa clave de la temporada.

Lourdes Carle

En la lista de espera aparecen otras cuatro argentinas que buscan su oportunidad. Son las “alternates”, es decir, jugadoras que pueden ingresar al cuadro principal si alguna preclasificada se baja o si la organización otorga invitaciones adicionales. Entre ellas hay nombres de presente y futuro.

Luisina Giovannini, número 277° del ranking, atraviesa un gran momento. Ganó 41 partidos en 2025 y fue una de las argentinas con mayor proyección del año. Su relación con Tucumán empezó cuando tenía 15 años y jugaba la qualy de los primeros torneos ITF sin ranking. Hoy, con experiencia y regularidad, apunta a meterse en las qualys de Grand Slams. En 2022 fue campeona sudamericana Sub-16 en Lawn Tennis, un recuerdo que sigue marcando su carrera.

Jazmín Ortenzi (247°) también busca su regreso triunfal. Disputó los W25 de 2022 y 2023, con un registro de tres victorias y cuatro derrotas. Su mejor actuación fue en 2023, cuando llegó a cuartos de final en Lawn Tennis. En 2025 lleva 44 triunfos y un rendimiento sólido en canchas lentas.

El listado de alternates se completa con Victoria Bosio (388°), una de las jugadoras más experimentadas del circuito ITF, con 30 victorias y 15 derrotas este año, y María Urrutia (504°), una joven en crecimiento que se sumará como apuesta a futuro.

La oportunidad de las argentinas para dar el salto en su carrera

El Tucumán Open by McDonald’s significará el regreso del tenis femenino internacional a la provincia, junto con una oportunidad para ver cómo maduraron aquellas jugadoras que empezaron a construir su carrera en este mismo escenario.

Sierra llega como la carta más fuerte del grupo argentino. Carlé y Riera buscarán confirmar su crecimiento. Ormaechea, revivir una historia que la une a Tucumán. Capurro, Giovannini y Ortenzi, demostrar que el recambio ya está en marcha.

Lawn Tennis, escenario de tantas primeras veces, volverá a ser testigo del punto de partida de una nueva etapa para el tenis argentino femenino.