El Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán alista el lanzamiento de la comisión especial que trabajará en la reforma del Código de Planteamiento Urbano (CPU), ordenanza que regula el desarrollo de la ciudad y permanece cambios sustanciales hace casi tres décadas.
Tras la prórroga del período de sesiones ordinarias que dispuso el cuerpo municipal en la última sesión, se confirmó que la puesta en funcionamiento del grupo de trabajo interdisciplinario será el 22 de este mes. Hasta ese día, el objetivo es llegar con todo listo para que la comisión especial quede en condiciones de iniciar la extensa tarea de analizar los distintos factores que se incorporarán al anteproyecto para el nuevo CPU.
“Es un trabajo que va a llevar un tiempo prudencial, dado que se va a escuchar a colegios profesionales, a universidades y a las áreas tanto de la Provincia como del Municipio (con competencia en el tema), entre otros sectores. Lo que se quiere es planificar una ciudad de acá a 50 años”, anticipó Fernando Juri, presidente del Concejo Deliberante, a LA GACETA.
El edil peronista Facundo Vargas Aignasse explicó que desde la anterior composición del cuerpo municipal se había intentado avanzar con un texto de estas características, pero “no había una conexión” con la gestión de Germán Alfaro (PJS) para dar ese paso. “Ahora es distinto; hay una voluntad tanto del Concejo Deliberante como del Departamento Ejecutivo municipal (DEM) para reformar el Código de Planteamiento Urbano”, dijo el justicialista en una entrevista con “Buen Día” (LG Play).
Participación de funcionarios
En ese sentido, Vargas Aignasse dijo que la labor no sólo contará con la participación de los ediles, sino también de cuatro funcionarios del equipo de la intendenta Rossana Chahla. A la vez, la comisión especial deberá aprobar su reglamento interno y definir las pautas que orientarán la discusión. Por ejemplo, según el edil peronista, está prevista la aprobación de un reglamento interno. Y también la elaboración de una fase de diagnóstico al inicio del tratamiento. “En esa etapa, se va a escuchar a todos los sectores: el Colegio de Ingenieros, el Colegio de Arquitectos, a quienes tienen a su cargo el Patrimonio Cultural de la Provincia. Y, en esas audiencias, se sacarán las conclusiones que darán paso a la siguiente etapa, relacionada a la recepción de los dictámenes de las distintas organizaciones”, añadió. La tercera fase, dijo Vargas Aignasse, consistirá en la redacción del anteproyecto y del dictamen final, con lo que sólo restaría el debate en el recinto de sesiones del Concejo. “El Código de Planeamiento Urbano no es intervenido desde 1998. Son casi 30 años. Por lo tanto, lo que buscamos es una reforma integral. Y sin el consenso de todos los sectores, esto no va a salir”, agregó el edil.
Presupuesto 2026 para San Miguel de Tucumán: se citará a funcionariosVargas Aignasse aclaró que, si bien en estas décadas se hicieron excepciones, tales circunstancias no forman parte del texto general vigente. “Un Código de Planeamiento es el conjunto de normas que tiene por objeto establecer los alcances y hacia dónde va a crecer la ciudad”, profundizó. Marcó que existe un amplio abanico de temas a debatir, pero enumeró entre ellos el uso y la ocupación del suelo; la construcción de edificios en altura; la cuestión del medio ambiente; y la problemática situación de la movilidad urbana. A ello se suman otros tópicos que están bajo análisis del oficialismo, como los servicios de agua y de cloacas, e incluso los cableados aéreos que atraviesan las calles de la ciudad.
“Tenemos que cambiar el CPU en su profundidad. Tenemos que tener medidas disruptivas, pero para ello hace falta contar con el consenso de todos los sectores. De lo contrario, al poco tiempo empezarían las críticas por una u otra medida. Por lo tanto, va a ser muy importante el trabajo en esta comisión”, planteó el dirigente peronista.