Hablaron cerca de cuatro horas y aportaron muy poco. Los técnicos de telefonía celular de la empresa "Claro" que llegaron desde Córdoba, y un especialista local de la firma "Personal", no puedieron brindar datos específicos sobre dónde se encontraban exactamente los móviles de los imputados Ema Gómez y Darío Pérez horas antes del asesinato del juez Agustín Aráoz, ocurrido el 26 de noviembre de 2004.
Mañana a la mañana seguirá declarando el técnico de "Personal" y se continuará incorporando pruebas por su lectura. Gómez y Pérez están acusados del asesinato del magistrado. El fiscal de Instrucción, Guillermo Herrera, consideró que una disputa sentimental motivó el crimen.
Los ex policías de Banda del Río Salí, Rodolfo Domínguez, Andrés Fabersani y Rubén Albornoz están imputados de los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento agravado. LA GACETA ©