Quienes se preocupan por la conservación de la Casa Sucar explicaron en las peatonales los fundamentos arquitectónicos, históricos, urbanísticos y ambientales que respaldan su postura, al tiempo que recolectaron firmas. El viernes a la noche se trasladaron a la vereda de la casona -Salta 532-. Allí, a la mesa informativa se sumaron los bafles a todo volumen. Llegaron los vecinos y poco a poco la defensa de la casa tomó color y sabor de tango. Se integraron desde muy jóvenes hasta muy mayores. Más tarde, con ayuda policial se interrumpió el tránsito y los bailarines, liderados por la Fundación Ateneo del Tango, ocuparon la calzada. Así transcurrió la peculiar protesta hasta más allá de la medianoche. Atraída por el baile llegó gente que se mostró interesada y firmó en apoyo de la iniciativa (ya hay cerca de 4.000 firmas).
Los activistas barajan la posibilidad de enviar una nota a la Comisión Nacional de Patrimonio (en Buenos Aires) con toda la información aparecida en la prensa tucumana. Además proyectan una nueva protesta, con baile, el viernes a la noche. Mientras tanto, a las medidas iniciadas en los ámbitos políticos se suma la de índole judicial que inició el Colegio de Arquitectos, fundamentada en un informe de valoración del Instituto de Historia de la FAU. La Comisión de Patrimonio se reunirá el jueves y probablemente haya novedades de Asesoría Letrada acerca de las notas de pedido de nulidad del dictamen sobre la casa Sucar.