CUPERTINO, Estados Unidos.- La presentación del rumoreado iPad Mini se hizo realidad ayer. La esperada tablet, a diferencia de su "progenitora", cabe en la palma de la mano. Sin embargo, no es tan pequeña como el nombre sugiere.

El nuevo dispositivo de Apple viene en dos tamaños: 7 y 7,9 pulgadas. También posee tres capacidades distintas de almacenamiento, de 16, 32 y 64 GB. Además, se puede escoger entre un gadget con capacidad de conexión Wi-Fi, o Wi-Fi + 3G.

Entre los aspectos técnicos se puede destacar una resolución similar a la de la primera generación de iPad y iPad 2, sin retina display; procesador A5 dual core, para brindar mayor velocidad de procesamiento; y soporte para Siri. También posee el nuevo cable "lightning", presentado con el iPhone 5.

El iPad Mini reune lo mejor de un iPad común. Cámaras FaceTime y iSight (Para ser el centro de las miradas y para mostrar lo que estás viendo, respectivamente), miles de aplicaciones compatibles con la versión estándar y autonomía de 10 horas sin batería. La mini tablet utiliza tecnología de retroalimentación LED, por lo que se percibirá más color por centímetro cuadrado en las imágenes. La cámara delantera también sirve para hacerte fotos o grabar vídeo en 720p HD.

En cuanto a la conexión, importante a la hora de compartir momentos, el dispositivo posee soporte Wi-Fi avanzado. Las descargas alcanzan velocidades de hasta 150 Mb/s gracias a la conexión Wi-Fi 802.11n de doble banda (a 2,4 y 5 GHz) y a la compatibilidad con la agrupación de canales. Todo será el doble de rápido. La conexión móvil también es de última generación; se conecta a redes móviles ultrarrápidas en todo el mundo, como HSPA, HSPA+ y DC-HSDPA. Así puedes descargar contenidos, reproducir vídeos en streaming y navegar por Internet a toda velocidad.

Los precios del iPad Mini serán de 329, 429 y 599 dólares para 16, 32 y 64 GB respectivamente. La versión con 3G podría ser un poco más cara. La preventa comenzará el viernes 26 de octubre. Si todo ocurre como con el iPhone 5, la venta sería una semana después. LA GACETA ©