BUENOS AIRES.- Dos de los máximos referentes de las comunidades israelí y palestina en la Argentina coincidieron en hacer un llamamiento a la paz en Oriente Medio, pero difirieron sobre el origen del conflicto armado que desangra la Franja de Gaza.
El flamante presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (asumió ayer en la DAIA), Julio Scholosser, acusó a los palestinos de provocar la reacción del Ejército de Israel en la zona. "Este conflicto es sentido y dolido por toda la humanidad. La pérdida de vidas humanas no puede ser compartida por nadie. Pero hay gente que debe entender que la paz se logra sobre la mesa de negociación y no arrojando cientos de misiles sobre la población indefensa, como está sucediendo en las ciudades israelíes, incluso hacia Jerusalén, capital espiritual del mundo", subrayó.
Guerra defensiva
Scholosser afirmó: "todo país tiene derecho a defender a su gente de un ataque indiscriminado". "Desde la creación del Estado de Israel, todas las guerras han sido defensivas", agregó, para desvincular la operación militar con el pedido de reconocimiento de Palestina como Estado observador, que se formalizará a fin de mes en la ONU. También negó que las acciones se relacionen con las elecciones parlamentarias de enero en Israel.
El dirigente hizo un llamado a "bregar por la paz, para que palestinos y judíos no sea rehenes de ideologías terroristas, para que podamos convivir allí como lo hacemos en otras partes del mundo que han soportado guerras".
El embajador palestino en Argentina, Wallid Muaqqat, por su parte, pidió a Israel que detenga la "masacre que está provocando en Gaza". "Si no cesa este derramamiento de sangre, la situación va a ser más grave, y puede tener una consecuencia que no queremos para nadie. No se puede pronosticar qué puede suceder, pero siempre la violencia crea más violencia. Queremos paz", subrayó.
Muaqqat aseveró: "es usual que la ultraderecha concrete ataques para ganar las elecciones; el que mata más palestinos es el que gana, así sucedió en comicios anteriores". "Lo que está sucediendo no es casual ni espontáneo. El asesinato del jefe militar de Hamas, Ahmed al Jabari, fue claramente planificado para provocar una respuesta de Hamas", señaló.
El diplomático remarcó que la Franja de Gaza es el sitio más poblado del mundo, con 4.500 habitantes por kilómetro cuadrado. "Es un lugar sitiado, el pueblo está en una gran cárcel, asfixiado. No hay equilibrio de fuerzas ni de consecuencias. Vivimos una carnicería contra el pueblo palestino", concluyó. (Télam)