NUEVA YORK.- Con el pelo blanco y sus largos dedos, el pianista de jazz Dave Brubeck seguía tocando hasta hace pocos años en el legendario club neoyorquino "Blue Note". Ya en ese entonces tenía casi 90 años, pero seguía deslumbrando al público con sus legendarios hits como "Take Five" o "In Your Own Sweet Way".
Brubeck, considerado uno de los mejores músicos de jazz de todos los tiempos, murió el miércoles, justo un día antes de su cumpleaños 92. El músico se encontraba en camino a una revisión de rutina en un hospital en el estado norteamericano de Connecticut cuando sufrió un infarto, informaron medios estadounidenses citando a su mánager de años.
Brubeck sacó el jazz de los bares subterráneos llenos de humo y volvió la música de improvisación apta para salones. Incluso llevó su música al templo de la clásica: Leonard Bernstein dirigió en 1959 en el Carnegie Hall de Nueva York el estreno de "Dialogues For Jazz Combo and Orchestra" de Brubeck con la Filarmónica de Nueva York. Cuatro años después, el "Dave Brubeck Quartet" se presentó solo en el mismo teatro con entradas agotadas. El concierto quedó eternizado en el álbum "At Carnegie Hall", que se convirtió en un clásico.
Brubeck creó "la música más bella que se tocó jamás desde que el jazz llegó al mundo", escribió la revista "Time", que dedicó la tapa a Brubeck como segundo músico de jazz después de Louis Armstrong. El álbum "Time Out" se convirtió en el primer disco de jazz que vendió más de un millón de copias.
En realidad, David Warren Brubeck, que nació en 1920 en una granja en el estado de California, había querido criar ganado igual que su padre. Pero su madre, que también era pianista, reconoció el talento de su hijo y le dio clases de piano. A pesar de ello, Brubeck estudió veterinaria, pero luego volvió a pasarse a la música. Entre sus profesores estuvo el compositor francés Darius Milhaud, que lo alentó a probar con el jazz, en ese entonces mal visto por muchos blancos. A Bruceck le gustó tanto la libertad de la improvisación, que nunca más abandonó la música.
Mientras estudiaba, formó su primera banda. Con el sonido conocido pronto como "west coast cool", conquistó las salas de conciertos de las universidades en Estados Unidos y sacó al jazz de los pequeños bares. "Jazz Goes to College" se convirtió en un disco muy exitoso. El "Dave Brubeck Quartet" actuó con estrellas como Stan Getz, Charlie Parker y Dizzy Gillespie en clubes de todo Estados Unidos. Más tarde, la banda, cuyos miembros cambiaron muchas veces, salió de gira por el mundo.
El "estilo Brubeck original" no sólo influenció a varios colegas, sino también a los cinco hijos y a la hija del pianista, que también fueron músicos.
Después de varias operaciones del corazón, Brubeck actuó esporádicamente en Estados Unidos y abandonó los escenarios internacionales. Sin embargo, en su casa, según contó su hijo Chris, nadie lograba apartarlo del piano. (DPA)