Ni bien pisó La Ciudadela comenzó a meter mano en el equipo. Pero no sólo eso; Roldán avisó que iba a descomprimir el estadio, a cuidarlo. Y ahí tomó protagonismo el predio "Natalio Mirkin", el mismo que el anterior cuerpo técnico casi no tenía en cuenta. "El Negro" dijo el primer día que las instalaciones servirán para el plan de trabajo que ya puso en marcha. El resto lo hace el DT, que cambió los manuales y comenzó a hacer lo suyo, lo que sabe. El cambio rotundo en la forma de trabajo fue evidente. "Sé que hago esto porque creo en esto. Se los comenté a los muchachos, el trabajo, y el porqué de cada trabajo. Si hay ejercicios, movimientos y variantes que nos dieron resultados, entonces uno los tiene que seguir aplicando, adaptándose claro, al momento, al lugar y a la nueva situación", dice. El DT ya les pidió sus hombres la mayor atención, la mayor comprensión posible. "Hay cosas que tienen que captarlas rápido porque tal vez son diferentes a lo que estaban acostumbrados. Es que si vengo a ser lo mismo de lo otro, entonces no serviría de nada".