Mario Alberto Kempes, el "Matador", habló sobre el fútbol actual, sobre la Selección y sobre el Mundial de Brasil 2014.
- Imagino que coincidís con todos en el nivel y la supremacía de Messi…
- "Lio" es maravilloso, tuvo un arranque de carrera formidable y, siete años después, mantiene ese ritmo inicial. No es común. Uno tiende a relajarse, se afloja un poco, se acostumbra en la comodidad de tantas cosas logradas. Se lo ve divertirse en la cancha. En ese aspecto es una especie de Ronaldinho, pero con más cuidados, más responsable. No se escuchan cosas de él, de salidas, noches, mujeres. Se nota que anda bien aconsejado.
- ¿Y como jugador?
- Es muy contundente lo que vemos todas las semanas. Fuera de lo obvio, me gustaría que se cuidara un poco más, juega demasiados partidos en el año, todos importantes, desgastantes. Siempre se lo marca fuerte, él absorbe la presión, la supera. Eso cansa mucho. Cuando uno es joven cree que puede saltear las vacaciones, pocos años después se da cuenta que no. Y te lo digo por experiencia. Tantos viajes, 70 partidos en un año jugando en Barcelona, te obligan a cuidarte y encontrar el tiempo de descanso. Probablemente, el hijo lo va a acomodar algo mejor en ese aspecto.
- ¿Y Barcelona te impresiona?
- Más que el nivel que alcanzó, me impresiona que lo sostenga tanto tiempo, que lo exprese todos los domingos. En los últimos dos meses de competencia bajó, pero esa baja solo podía ser expuesta por poquitos equipos, y quedó claro que Bayern era uno de ellos. Mirando el juego, quizás pecó de poco recambio en los centrales, Puyol tuvo varios problemas físicos, por ende varias ausencias, y eso se sintió. Sí o sí debían jugar Piqué o Mascherano, independientemente del nivel en el que estuvieran, ya que la opción eran chicos todavía muy verdes. Creo que será un equipo muy fuerte todavía, aunque pensando en un ciclo de tiempo más largo, el recambio va a ser difícil. No todos los días sale un Xavi o un Busquets. Tampoco un Messi o un Iniesta, pero ellos son más jóvenes y todavía tienen varios años por delante.
- ¿Qué te sugiere el actual proceso de la Selección, a solo meses del Mundial?
- A Sabella lo conozco poco, de cuando jugaba, jamás he charlado de fútbol con él. Se ve que está haciendo un gran trabajo y que ha conseguido lo que otros no pudieron. Messi está contento y contenido. Evidentemente confía en Alejandro, entonces acepta sugerencias y delega algunas cosas en sus compañeros. Ya no quiere tomar la pelota en mitad de cancha y meter el gol. Ahora deja que otros hagan, se concentra en lo suyo, y esto es mejor para él y para el equipo.
- A un año de Brasil 2014, ¿imaginás una satisfacción como la de hace 35 años?
- Un año es mucho tiempo en el calendario, aunque eso no signifique necesariamente muchas posibilidades de trabajo. Sabella ya tiene su grupo, esto es lo que eligió aunque aún podrá meter alguna variante. Y si Messi llega descansado, bien con él mismo y con sus compañeros, Argentina tendrá su chance. Agüero está maduro y ojalá Tevez tenga lugar. A mí me gusta, creo que puede aportar. Higuaín cambiará de aire y tendrá más minutos. La clave estará en cómo llegue la estructura defensiva. Y de cómo se den esas cosas que no dependen de nadie, que no se pueden explicar, y que a veces te favorecen y otras no.