El "Súper 8" ya nos tiene acostumbrados a esta clase de dramatismos. Con la densa presión atmosférica que los resultados del sábado dejaron en la tabla, Huirapuca y Los Tarcos se sacaron los ojos en un duelo trepidante, cuya igualdad (26-26) clasificó automáticamente a los "gauchos" a la Copa de Oro. Allí donde también estará Cardenales, que también resultó favorecido por el resultado y por el triunfo de Universitario en el clásico salteño ante Jockey (24-23).
Que el "rojo" haya elegido clausurar el tema sacando la última bocha afuera por voluntad propia ilustra qué clase de infierno se vivió en el Parque de la Joven Argentina. Duro, como presagiaba el estilo de choque de ambos contendientes. Tal vez por estar tan cerca de la clasificación, a "huira" se lo notó cauteloso, pensante, arriesgando poco y jugando a lo seguro. Así fue que los del ex aeropuerto los complicaron por el lado de los forwards. En ese aspecto, el scrum resultó clave, aunque el elenco de Concepción no regaló espacios y el score solo se alteró con disparos lejanos.
Cabeza a cabeza, ambos se animaron a arriesgar un poco más en los últimos 40 minutos. Alentado por su público, Huirapuca marcó el terreno, se adueñó de la pelota y imprimió dinámica al juego.
El try de Gabriel Herrera y un penal de Ezequiel Faralle sacaron presión de los hombros y los llevaron al bando contrario. Pero el "rojo" respondió aprovechando un error en la marca, llegó al ingoal por medio de Gerardo Perdiguero. Poco después, un try penal visitante dejó a los "gauchos" a 10 minutos de resignar su invicto de local. Sin embargo, con voluntad de hierro empujaron, y cerca del final, llegó el try de Augusto Miranda, cuya conversión dejó el asunto en tablas.
Los Tarcos y Universitario (T) definirán en la última fecha quién ingresa al cuadrangular definitivo y quién lo mirará desde afuera. Cardenales y Huirapuca esperan.