LA RIOJA.- Cuando el cuerpo de Lucía María José Ruarte Contreras, de 19 años, apareció colgado de un árbol en la zona del Parque Industrial de la capital riojana, la Policía pensó que se trataba de un suicidio. Ahora, su familia apunta contra su concubino, quien según indicó la golpeaba constantemente. La joven fallecida cursaba un embarazo de tres meses y deja una hija de 2 años.
Esta mañana, Juana Contreras, madre de la joven, denunció que, cuando le entregaron el cuerpo, dijo, Lucía “tenía marcas en el brazo izquierdo, la espalda morada, las orejas moradas, y tenía marcas como si hubiese estado esposada”, y apunto contra el joven que vivía con ella, a quien apodan "Moco".
Contreras sospecha que el cadáver de su hija habría sido colgada después que la mataron, al tiempo que admitió que su hija era adicta a sustancias. A su vez, sobre los rumores si trabaja en la calle, dijo “mi hija no era prostituta y estaba embarazada”.
El abogado Miguel Ángel Morales ya representa a la mamá de la joven fallecida y los investigadores, que en un principio consideró al caso como suicidio, ahora no descartan la hipótesis de un crimen, luego de escuchar la versión de la madre y de realizar nuevos exámenes al cuerpo de Lucía.