BUENOS AIRES.- El jefe del gremio gastronómico nacional, Luis Barrionuevo, abogó por lograr la unidad del sindicalismo después de octubre, cuando se definan las elecciones legislativas. Y señaló que para los trabajadores "el problema más grande es el inflacionario".
Respecto de los cambios dispuestos por el gobierno para el cálculo en el impuesto a las ganancias en los sueldos de los asalariados, señaló: "a esta medida la vemos bien, más allá de que es tardía. Es una medida electoralista puramente".
"Acá hay un tema político. Hay gremios que están comprometidos con el Gobierno cristinista, caso puntual (el del metalúrgico Antonio) Caló. Ellos mismos ya están viendo que el kirchnerismo se termina, entonces todos empezamos a buscar la unidad del movimiento obrero", añadió.
Fracturada
Barrionuevo también señaló, en una entrevista con el diario El Tribuno, que desde su sector habían "planteado esto en todo momento. Después se fueron 'los Gordos' y después (Hugo) Moyano, así que quedó la CGT partida en muchos pedazos y trataremos de fusionarla". "Trataremos de ver si después de octubre podemos darle a los trabajadores algo serio como la unidad del movimiento obrero, y poder en serio trabajar en algunos temas que son puntuales", acotó el sindicalista de la CGT Azul y Blanca afín al moyanismo.
Asimismo, apuntó: "acá el problema más grande que nosotros tenemos es el inflacionario. Los gastronómicos cerramos paritarias con cuatro cámaras y cuando vos empezás a cobrar el aumento -que normalmente lo haces en tres partes- te lo comió la inflación", añadió. Y, sostuvo: "los alimentos son los que más han aumentado de todos los servicios que tienen que ver con el hogar. El asunto a vencer es la inflación, y es un tema que el Gobierno nunca ha admitido".
Barrionuevo acotó que el anuncio de la Casa Rosada de que impondrá una leyenda en los recibos de sueldos que indica que el cambio en Ganancias "es una medida del Gobierno nacional, es insólito ya que es plata de los trabajadores que el Gobierno venía reteniendo injustamente desde hace algunos años".
"Los últimos dos años fueron los que el Gobierno más acrecentó, a nivel de paritarias, la presión impositiva sobre Ganancias, ya que nos venían sacando una parte importante del salario. Se subsidiaban otras cosas con la plata de los trabajadores", remarcó. Consultado sobre si el anuncio por Ganancias descomprime la conflictividad gremial, dijo: "No, para nada. Hay otros problemas que van a afectar después de octubre". (DyN)