Una protesta de vecinos impregnó el frente de la sede comunal de El Timbó con el denso humo negro que sueltan las cubiertas cuando arden. Se concentraron allí para reclamar -por cuarta vez en el año, según dicen- solución para la falta de agua que padecen, entre otros. La medida no bloqueó, sin embargo, el tránsito sobre la ruta N° 305.
Según relataron los manifestantes, sólo un 20% de los vecinos cuenta con agua corriente. "Al resto se le reparte en tractores o en camiones; pero se hace una distribución discrecional: a los más activistas les demoran la provisión", acusó Sebastián Cuello. Muchas mujeres, en su mayoría con hijos en brazos, agregaron que el agua que se distribuye no resulta apta para el consumo: "en algunos casos llega con animales muertos". Alfredo Pérez denunció que el Gobierno contrató tractores de lugareños para que repartan el agua, pero que todavía no les pagaron. "Ellos pusieron de su bolsillo para pagar el gasoil y los jornales, y nadie se hace cargo. Acá tiene que venir el gobernador (José Alperovich) para que vea qué están haciendo estas autoridades", dijo. Esto fue ratificado por Roque Redondo y Hugo Moyano, los propietarios de los tractores. "Nos dijeron que ellos iban a poner los tanques, que nosotros pusiéramos los vehículos; y así nos tienen: con que nos pagan hoy, que nos pagan mañana. Hasta personal nos hicieron poner", contó Redondo.
LA GACETA dialogó con Sergio Gramajo y con Luis Terán, comisionado y secretario habilitado de la comuna de El Timbó, respectivamente. Admitieron la escasez de agua, pero pidieron paciencia a la población. "El problema del agua es de toda la provincia. Acá se hizo un pozo, pero el agua que sacamos no era apta para consumo, porque era salada. Ahora se encuentra en la Nación un proyecto para hacer otro pozo, que solucionaría el problema en las localidades de Alta Gracia y La Ciénaga", explicó Gramajo. Terán precisó que esa obra se llevará a cabo por medio de la Corporación Andina de Fomento. "Lamentablemente, debemos esperar; pero ellos quieren que en un mes esté el pozo", dijo.
Entre sus reclamos, los manifestantes colaron el pedido de intervención de la comuna. "Acá no hay ningún causal de intervención; los balances están al día, no hay malversación de fondos. Pasa que detrás de esto hay un interés político: entre los que protestan hay personas que se postularon para comisionado y que no ganaron en las elecciones; ahora están utilizando a la gente", manifestó Gramajo.
La protesta se desarrolló bajo la mirada de unos 15 policías, armados con cachiporras y escudos.