El alperovichista Osvaldo Morelli ya era intendente de Concepción en 2006, cuando a la vez ocupó una banca por Participación Cívica (PC) en la Convención Constituyente (CC) que reformó la Carta Magna provincial. Según documentación aportada por Carlos Courel, que fue presidente de esa bancada, el chofer del jefe municipal, José Enrique Salica, había percibido en esa ocasión $ 32.000, por su labor como asesor de la CC. “Yo, la verdad, no sabía de esta cosa”, señaló el conductor, en una entrevista a este diario a principios de mes. Por escrito, Morelli salió a respaldarlo.
“Vengo a defender y resguardar el buen nombre y honor de Salica, quien desde hace muchos años se desempeña únicamente y sin variantes como chofer de la Municipalidad de Concepción”, apuntó el intendente. Agregó que Salica no prestó servicios como asesor, y que no cobró tampoco fondos de la Convención. También sostuvo que la firma estampada en los comprobantes de pago aportados por Courel es diferente a la de su actual empleado. “De los recibos publicados, no surge relación alguna con la CC, no sólo porque aquél no participó bajo ninguna forma con la misma, sino porque esos instrumentos carecen de toda formalidad legal: ausencia del membrete específico (como tienen otros recibos que se han publicado en ese medio -en alusión a LA GACETA-); tampoco consta el concepto de pago ni otro dato que fehacientemente lo ligue con la Convención Constituyente, no resultando suficiente el simple sello incorporado, ni el agregado del nombre del convencional al pie del instrumento expuesto”, expresó Morelli.
Respecto a estas presuntas anomalías, apuntó contra Courel y su ex equipo de trabajo de PC. “Que quede claro que dichos recibos falsos han tenido origen en las oficinas administrativas del señor presidente del bloque Participación Cívica y/o en las del grupo de sus colaboradores directos”, agregó. Además, sostuvo que apoyará a su chofer si este inicia acciones legales.
Morelli recordó que el Tribunal de Cuentas no realizó observaciones en los controles preventivos y posteriores sobre los gastos de aquel cuerpo, y que la CC aprobó el manejo de los fondos realizado por su presidente, Juan Manzur, en la última sesión, en junio de 2006.
La Convención fue convocada por la ley N° 7.469/4, que establecía los límites para reelaborar el texto. En sus artículos, se indicaba que el cargo de convencional sería ad honórem (es decir, sin remuneración), aunque estos podían efectuar gastos para asuntos administrativos, como el pago de asesores.
A fines de noviembre, cuando se dio a conocer que Courel había rubricado certificados de pago por un total de $ 84.000, este visitó LA GACETA con documentación. “Traigo los recibos que yo, como presidente del (bloque del) partido, hacía firmar a los integrantes. Ahí (en el margen derecho inferior del papel) están las firmas de la persona (que se contrató), y abajo el nombre del convencional con el cual trabajaba”, describió el ex dirigente. Y, aludiendo a uno de los comprobantes que había acercado, detalló: “acá aparece un tal Salica; abajo dice Osvaldo Morelli. Significa que era asesor de Osvaldo Morelli. Pero quien recibía la plata no era Morelli, sino Salica”. Luego se rectificó, y dijo que conocía al chofer del intendente de vista: “él llevaba a Morelli, pero no era asesor”.