SALTA.- Con 41.4 grados, Orán -al igual que numerosas ciudades salteñas y del resto del Norte argentino- se convirtió ayer en una sucursal del infierno.
En el norte de Salta, para colmo, los vecinos de varias localidades, como Pichanal, Embarcación y Morillo, estuvieron, desde las 23, sin luz y sin agua, tras un corte generalizado de los servicios.
La zona norte cuenta con una sola central eléctrica y, según el sitio "Qué Pasa Salta", la demanda hizo colapsar el servicio.