¿Qué tienen en común Paola Orola, Eusebio Crisanto Santillán, Sabina Robles, Humberto Díaz, Pedro Caro y María Roldán? Ellos, al igual que cientos de personas, dedicaron la mañana de ayer para encontrar y comprar la Tarjeta Ciudadana, que desde hoy será el único modo de pago para viajar en los ómnibus de las 14 líneas urbanas.
Los tucumanos se agolparon en los diferentes puntos de venta urgidos por la necesidad de adquirir el preciado plástico, ante la inmediatez del ultimátum. El cospel fue usado por última vez ayer, luego de 25 años en circulación.
Muchas bocas de expendio se colmaron de gente. La escena recurrente en algunas de las calles con pesado tránsito de colectivos (Santiago, Salta-Jujuy, Crisóstomo Álvarez, Monteagudo, entre otras) eran colas de entre 10 y 20 personas que aguardaban sobre la vereda para comprar o recargar la tarjeta en los diferentes drugstores.
Sin embargo, el principal lugar de espera para conseguir el plástico fue el CAU de Junín primera cuadra, en donde la fila zigzagueaba hacia el sur, doblaba por 24 de Septiembre y hacía un rulo en el amplio acceso de un estacionamiento para regresar hasta la esquina de Junín. Sucede que en este punto de venta nunca escasean las tarjetas, a diferencia de muchos de los otros 194 puntos de venta. Tal era la cantidad de gente, que efectivos de la policía Federal organizaban el ingreso de gente al salón y repartían números para evitar las picardías que siempre vuelven la espera indignante. La banda sonora era el sonido del tráfico céntrico y la voz de algunos ambulantes que ofrecían “portatarjetas” en toda gama de colores, para proteger la reciente adquisición. Inclusive, estos vendedores aconsejaban a algunos clientes sobre el modo de uso del nuevo sistema.
A pesar de que Paola Orola ya había comprado su tarjeta, fue al centro de atención de la empresa Atos (a cargo de la implementación del sistema), a comprar una para su madre. Por su parte, Santillán es usuario de la línea 5, y lleva días buscando la tarjeta. Como no pudo encontrarla en las oficinas de la línea de colectivo que frecuenta, fijó su norte hacia el CAU. “Hace una hora que estoy esperando, y me queda otro trecho. Viajo todos los días en colectivo y ya ví como funciona el sistema, así que no tendré problemas para acostumbrarme. Ahora tendré que buscar un comercio cerca de mi casa donde hacer la recarga, porque en la zona donde vivo no hay”, indicó.
Robles (vive en Villa Amalia), Díaz (San Cayetano) y Caro (vive en Famaillá, pero viene a la ciudad a trabajar y viaja en el 19), acudieron al CAU por el mismo motivo que gran número de personas: no la encuentran puntos de venta en los barrios en los que viven. “Hay pocas bocas de expendio, ya no se venden cospeles ¿en qué viajamos entonces?, reclamó Viviana Robledo, que vive en el barrio Alperovich.
1 ¿Dónde puedo conseguir la tarjeta?
De acuerdo al último listado de la Municipalidad, hay 194 puntos de venta en la ciudad. Podés consultar el listado en el sitio web del municipio (www.sanmigueldetucuman.gov.ar). La tarjeta nominal (la única en circulación) se entrega sin costo, pero para retirarla se debe hacer una primera carga de cuatro viajes ($12).
2 ¿Cuántos tipos de tarjetas tiene el sistema?
Hay dos tipos de tarjeta: la nominal y la precargada. La nominal (se compra con DNI) es un plástico similar al de las tarjetas de crédito y puede recargarse ilimitadamente. Las precargadas cuestan $5 y vienen cargadas con $10 y con $20. Pueden volver a cargarse hasta tres veces y se estima que se venderán en febrero.
3 ¿Dónde más puedo conseguir las tarjetas?
Las oficinas de las empresas urbanas -donde se tramitan los abonos- también son puntos de venta y recarga de tarjetas. En el Centro de Atención al Cliente (CAU) de Junín 58 también podés conseguir la tarjeta. Desde ayer, también hay puntos de recarga en las plazas Independencia, San Martín, Urquiza y Belgrano.
4 ¿Qué novedades habrá en febrero?
Según las autoridades, una vez cerrado el acuerdo los supermercados locales también serán puntos de venta de los plásticos. Se mantendrán los puntos móviles de recargas que funcionan en las plazas céntricas y se instalarán puntos de “carga automática” con máquinas similares a los cajeros automáticos.
5 ¿Y el saldo negativo?
La posibilidad de viajar hasta dos veces sin crédito (con saldo negativo) con las tarjetas nominales entrará en vigencia a partir de la semana próxima. Los viajes se descuentan al volver a cargar la tarjeta.
6 ¿Cómo funciona el sistema?
Es muy simple: se debe colocar la tarjeta (del derecho o del revés) a una distancia menor a 10 centímetros de la lectora del ómnibus. Al descontar un viaje, se enciende una luz verde y una pantalla indica el saldo remanente.
7 ¿Y las tarjetas precargadas?
Estas aún no están a la venta a causa de problemas de importación, según dijo Juan Dabusti (CEO de Atos Argentina). Cuando estén a la venta, estas tarjetas podrán venderse en negocios sin necesidad de que adquieran el posnet.
8 Seguridad
Al recargar la tarjeta asegurate de recibir el tícket, allí podrás controlar el dinero cargado. El número de la tarjeta y del ticket deben coincidir. Si sufriste un robo llamá al 0800-444-8483 para que recuperes el crédito.