BUENOS AIRES.- Ya está. Se sacó otra espina, o mejor dicho, volvió a demostrar que tiene con qué hacer la rotación para afrontar el certamen local y la Copa Libertadores. San Lorenzo venció a Quilmes por 1 a 0 y sumó su tercera victoria consecutiva, racha que le permite compartir con Estudiantes y Colón el primer puesto de la tabla, ubicación que mantendrá si es que Rosario Central no derrota hoy a Godoy Cruz en Mendoza.
El técnico Edgardo Bauza apeló nuevamente a la rotación pensando en el duelo copero (el jueves recibirá a Independiente del Valle de Ecuador y en la visita del domingo a River). Piezas claves como Julio Buffarini, Néstor Ortigoza, Héctor Villalba y Carlos Valdés fueron desafectadas y tuvieron sus chances Ignacio Piatti, Santiago Gentiletti, Enzo Kalinski y Gonzalo Prósperi.
Pese a los cambios, el “ciclón” no renunció a su estilo de juego: presionar al rival para quitarle la pelota y golpear a través del buen juego. No le resultó sencillo, porque se enfrentó a un aguerrido “cervecero”.
Hubo un momento clave en el encuentro: a los 9 minutos, el arquero Sebastián Torrico le tapó un remate a Jonathan Zacaría y un minuto después, Ángel Correa realizó una jugada perfecta que Piatti, con un certero cabezazo, transformó en gol. Ese tanto hundió aún más a Quilmes que sumó su cuarta derrota consecutiva y que está anclado en zona de descenso.
“En líneas generales me voy conforme. Se hizo un gran esfuerzo para mantener la valla invicta. Al equipo lo vi comprometido para ser más sólido y no tan vertical como antes”, rescató Bauza.
El técnico también destacó que su equipo lleva tres encuentros sin que le conviertan un gol. “Felicité a Torrico, esa es su verdadera misión, pero no hay dudas que se encuentra en un gran nivel”, insistió.
El “Patón” no se endulzó con el triunfo, y en la misma conferencia de prensa comenzó a pensar en el duelo copero. “Mañana (por hoy) tenemos que trabajar pensando en los próximos compromisos que no serán fáciles”, concluyó. (Especial)