NUEVA YORK.- El número de víctimas fatales por la explosión sigue en aumento, mientras continúa la búsqueda entre los escombros. Ayer se confirmó que al menos ocho personas murieron, más de 70 resultaron heridas y otras tres permanecen desaparecidas por la explosión y posterior derrumbe de dos edificios de departamentos en Harlem Este, en el norte de Manhattan.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, sostuvo que los trabajos de búsqueda continuarán y no descartó “encontrar con vida” a alguno de los desaparecidos. De Blasio visitó el lugar del derrumbe junto con el jefe de Bomberos neoyorquino, Edward Kilduff.
Las autoridades ya identificaron a tres de los fallecidos. El diario “The New York Post” precisó que se trata de Griselde Camacho, de 48 años, responsable de seguridad pública en el Hunter College; Carmen Tanco, de 67 años, asistente dental; y Rosaura Hernandez, de 21 años. El Consulado de México en Nueva York confirmó que dos de las víctimas tienen nacionalidad mexicana.
Las autoridades federales de seguridad iniciaron una investigación sobre la explosión de gas. Los escombros aún humeantes continuaban interfiriendo la tarea de los investigadores que buscan acercarse lo suficiente para examinar la tubería principal que suministra gas natural a la zona del Upper East Side, sostuvo Robert Sumwalt, miembro de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte que revisa los accidentes con gas natural. Cuando los bomberos informen que la zona es segura los investigadores llevarán a cabo una prueba de presión en la tubería para ubicar la fuga que pudo haber causado la explosión.
“Estamos operando en este punto bajo el supuesto que se trata de una fuga de gas natural que llevó a una explosión”, dijo Sumwalt. (Télam-Reuters)