Karol Józef Wojtyla
(18/5/1920-2/4/2005)
“El Papa peregrino”, moderno y conservador, y carismático
Fue el primer Papa no italiano y tuvo uno de los pontificados más largos (1978-2005, casi 27 años).
Recorrió alrededor de 1,3 millón de km y visitó más de 133 países. Entre ellos Argentina, en 1987. En Tucumán estuvo una hora.
Fue el primer Papa que visitó una sinagoga.
Fue ordenado sacerdote el 1/10/1946 y su consagración episcopal fue el 28/9/1958.
Su proclamación cardenalicia fue el 26/6/1967. Su predecesor fue Juan Pablo I.
Durante su pontificado sobrevivió a cinco intentos de asesinatos (el más grave, el disparo a poca distancia de Alí Agca en la Plaza San Pedro; la bala extraída de su cuerpo la dejó en el santuario de la Virgen de Fátima, en Portugal), y siete operaciones.
Como parte de su especial énfasis en la llamada universal a la santidad, en 143 ceremonias beatificó a 1.340 personas y canonizó a 483 santos, más que la cifra sumada de sus predecesores en los últimos cinco siglos.
El Papa “viajero” escribió 14 encíclicas, 13 exhortaciones apostólicas; 11 constituciones apostólicas; 42 cartas apostólicas y 28 Motu propio. Entre sus escritos de joven, se destaca la obra teatral “El taller del orfebre”, convertida más tarde en ópera rock.
Sus frase más destacadas se refieren al comportamiento humano: “La guerra nace en el corazón del hombre, porque es el hombre quien mata y no su espada o, como diríamos hoy, sus misiles”.
“No podría emprenderse nunca un proceso de paz en el mundo si no madura en los hombres una actitud de perdón sincero”.
“No confíes en la violencia. No la apoyéis. No es este el camino cristiano, de la Iglesia Católica. Creed en la paz, en el perdón y en el amor de Cristo”.
Antes de morir, dejó una carta que decía: “Soy feliz, séanlo también ustedes. No quiero lágrimas. Recemos juntos con satisfacción. En la Virgen confío todo felizmente”.
El 19 de diciembre de 2009, Juan Pablo II fue proclamado “venerable” por su sucesor, el papa Benedicto XVI, quien posteriormente presidió la ceremonia de su beatificación el 1 de mayo de 2011.
Porqué es santo: se destacan tres elementos de la figura del “Papa peregrino”: fe sencilla, profundidad mística de los estudios de San Juan de la Cruz y valentía para afrontar las contrariedades de la vida. Los postuladores del Vaticano hicieron una síntesis de su espiritualidad, y reconocieron que "a través de esa cercanía con el pueblo de Dios quería sentir con el corazón de la Iglesia". Y así, tenía un solo propósito: “evangelizar para llegar a la santidad”.
Redemptor Hominis.- (“El redentor del hombre” 4/3/1979) Trata sobre sobre la redención de Jesús al mundo y la centralidad de la persona humana.
Dives in Misericordia.- (“Rico en misericordia, 30/11/1980) Trata sobre la misericordia divina.
Laborem Exercens.- (“Ejerciendo el trabajo, 14/9/ 1981). Habla sobre el trabajo humano en el 90° aniversario de la Rerum Novarum (“De los cambios políticos”), primera encíclica social de la Iglesia, de León XIII, mayo de 1891.
Slavorum Apostoli .- (“Apóstoles de los esclavos”, 2/6/1985) Rememora la obra evangelizadora de los santos Cirilo (o Constantino) y Metodio, dos hermanos que se convirtieron en misioneros del cristianismo, a 11 siglos del fallecimiento del segundo.
Dominum et Vivificantem.- (“Señor y dador de vida”, 18/5/1986) Trata sobre el Espíritu Santo en la vida de la Iglesia Católica y del mundo.
Redemptoris Mater .- (“Madre del Redentor”, 25/3/1987) Recorre la vida de la Bienaventurada Virgen Maria en la Vida de la Iglesia peregrina.
Sollicitudo Rei Socialis .- (“Atención de la realidad social”, 3/12/1987) Conmemora el 20° aniversario de la encíclica Populorum progressio (“El desarrollo de los pueblos”),del Papa Pablo VI.
Redemptoris Missio .- (“La Misión del Redentor”, 7/12/1990) Acerca de la permanente validez del mandato misionero.
Centesimus Annus.- (“Centésimo año”, 1/5/1991) Conmemora el centenario de la encíclica Rerum Novarum.
Veritatis splendor .- (“El esplendor de la verdad”, 6/8/1993). Trata sobre algunas cuestiones fundamentales de la enseñanza moral de la Iglesia. Juan Pablo II advierte: “ningún hombre puede eludir las preguntas fundamentales: ¿qué debo hacer?, ¿cómo puedo discernir el bien del mal? La respuesta es posible sólo gracias al esplendor de la verdad que brilla en el espíritu humano (…)”.
Evangelium Vitae.- (“El Evangelio de la vida”, 25/3/19952). Trata sobre el valor y el caráter inviolable de la vida humana. Haciendo suyas las palabras del Concilio Vaticano II, a tres décadas de su consumación, el Papa condena “todo lo que se opone a la vida, como homicidios, genocidios, aborto, eutanasia y suicidio”
Ut Unum Sint.- (“Para que sean uno”, 25/5/1995. Sobre el empeño ecuménico.