No fueron invitados a los festejos de hoy por el cumpleaños número 50 de los “Mellizos”. Enviaron, sin embargo, un “regalo político” a los cumpleañeros. Los ocho -de 10- concejales de Famaillá que responden al Gobierno provincial aprobaron en la última sesión varias ordenanzas que traerán más de un dolor de cabeza a los ahora massistas Enrique y José Orellana, intendente y legislador, respectivamente.
Entre una decena de pedidos de informes y de obras, la mayoría del cuerpo decidió limitar las contrataciones directas y eliminar las reasignaciones presupuestarias; derogó una ordenanza que permitía la construcción de un shopping en la Municipalidad y pidió informes sobre el dinero que ingresa por la explotación de los locales comerciales en el parque temático histórico. “Es todo político”, consideró el jefe municipal y aseguró que analizará si promulga o no las normas.
Recursos y proyectos
Primer golpe. El cuerpo aprobó un proyecto que limitará a Orellana en cuanto al uso de recursos. La iniciativa derogó dos artículos y modificó otro del Presupuesto 2014, que permitían al intendente “compensar” partidas y cambiar “transitoriamente” el destino de fondos. Otro lo autorizaba a efectuar compras y contrataciones directas en procedimientos que no superara el $ 1,2 millón. Ahora, el tope bajó a sólo $ 20.000. Así, prácticamente todas las adquisiciones deberán hacerse por licitación. “Es para tener más control. Se decía que llegaba plata y no sabíamos adónde iba. Ahora las cosas se harán como se debe. Si la veta, insistiremos”, desafió el presidente del Concejo, Juan Villafañe.
Segundo golpe. Una de las iniciativas emblemáticas de los “Mellizos” había sido, en 2011, la de la posibilidad de la construcción de un shopping en la actual sede municipal. Los ediles díscolos la derogaron. “En dos años y medio no pasó nada. No hubo ni un interesado. Quizás un futuro intendente pueda hacerlo mejor”, afirmó el edil Rubén Medina.
Tercer Golpe. Si los Orellana están orgullosos de una obra, ese es el parque temático que reúne réplicas de edificios históricos como la Casa Histórica y el Cabildo. Los concejales pusieron la lupa sobre la explotación de los locales comerciales -la mayoría gastronómicos- que funcionan allí. Requirieron planos de obras, términos de las licitaciones y de los contratos, entre otros detalles. “Se adjudicaron a gusto del intendente. No se sabe quiénes son los dueños. Se creó una franquicia, ‘Empanadas del Famaillá’, y queremos saber a nombre de quién está”, aseguró Villafañe.
“La relación con la Municipalidad está cortada. Famaillá está perdiendo, nos están castigando por ellos. No entramos al ‘Más Cerca’ y está llegando menos plata. La gente pierde porque ellos se apresuraron”, recriminó el titular del cuerpo a los Orellana.
Villafañe y Medina encabezan el grupo de representantes vecinales disidentes que completan Julio Zavala, Miguel Robledo, Diego Salim, Julio Romano, Eliana Carreño y Elías Abraham. Responden directamente al ministro del Interior, Osvaldo Jaldo. Por otro lado, aún integran el orellanismo Marta Ale y Marcelo Masmut.
“Quieren destruirme”
“Esto es político. Estos muchachos entregaron el alma al diablo por plata. Dirigidos por la Casa de Gobierno, pergeñaron esto”, lamentó el intendente. Renegó porque fue excluido de la nueva etapa del plan de obras “Más Cerca” y por la reducción del monto para compras y contrataciones directas. “Como soy una persona de bien y un buen dirigente, si la ley es así, se hará. No me molesta, mientras más transparencia haya es mejor”, anunció Orellana.
“Vendieron su lealtad y se olvidaron por quiénes salieron. Dudo de que sean decisiones de ellos. Hay cuatro que están arrepentidos y volverán al orellanismo. Estoy acostumbrado a la lucha, siempre recibí menos que otros municipios”, advirtió.
Explicó, en relación a los locales del parque, que son cedidos para atraer comerciantes e inversores. “El municipio se comprometió a aportar la mano de obra y la inspección. Los interesados, sólo los materiales. Necesitamos servicios allí. Famaillá es una ciudad turística y creció gracias a ello”, detalló. El “Mellizo” aseguró que el proyecto para un edificio municipal moderno, en tanto, quedará “para el próximo intendente”.
“Están gobernando todos, menos los justicialistas. Nos pusieron un legislador (por Jesús Salim) y una diputada (por Mabel Carrizo) y compraron ocho concejales para que nos destruyan políticamente. No estamos dentro de este proyecto, ¿para qué nos íbamos a quedar? No somos masoquistas. Nos vapulearon y ahora nos quieren hacer pasar por desleales”, concluyó dolido. El intendente remarcó, por último, que la Provincia les está enviando $ 750.000 menos por mes de los fondos del “Pacto Social”.