Cuando las coincidencias se suceden unas a otras llega un momento en que dejan de llamarse así. El destino cruzó en la grilla de Héctor Rivoira a Iván Etevenaux, y Belgrano, dueño de su pase, casi le hizo saber al volante por derecha que tanto la dirigencia como su DT, Ricardo Zielinski, querían que siguiera.
“Atlético es un grande de Argentina”, resume en cierta forma el motivo por el cual aceptó dejar un club de Primera para ir a buscar el regreso a la A con el “decano”. “Hubo un sondeo por mí desde el principio, después se dio. Me interesó saber de la necesidad del club de volver a Primera”, dice quien ayer regresaba con el “pirata” de Necochea a Buenos Aires, donde finalmente terminó volcándose por Atlético y firmando contrato.
“Tengo que pasar por Córdoba a buscar unas cosas y después voy para Salta. El lunes mismo estoy allá”, confirma quien tendrá un conocido en el grupo: Sergio Rodríguez, también ex Belgrano que el jueves se presentó en la concentración en “La Linda”.
“Todavía no tuve la posibilidad de hablar con Sergio, igual pronto lo haré, cuando lo vea allá y me sume al resto del grupo. Espero adaptarme lo más rápido posible”, pide a modo de deseo el medio de 24 años con pasado en Douglas Haig (fue a préstamo) la temporada pasada.
Etevenaux viene a llenar una posición en la cancha que Rivoira por ahora no tiene al 100% cubierta. El carril ofensivo derecho es vital en el esquema futuro del entrenador. Iván deberá ganarse un lugar. “Con el técnico hablé un poco, me dio la bienvenida, al igual que los dirigentes. Fueron palabras cortas, pero lo que importa es el mensaje de bienvenida”, explica Etevenaux, que ve con buenos ojos que por cada zona haya tantos ascensos a la A.
“Sabiendo que suben cinco clubes por grupo, es una linda oportunidad...”.
Salvo por Martínez, el carrilero deberá empezar de cero, en cuanto a amistades se refiere. “Del resto no conozco a nadie personalmente, pero tengo ex compañeros que jugaron en Atlético y me dieron buenas referencias del grupo. Me hablaron bien de todos los chicos”, confía Etevenaux en un tono cordial y positivo.
La primera experiencia del cordobés será en soledad. “Viajo a Salta, termino la pretemporada con el grupo, regreso a Tucumán y me pongo en campaña en buscar dónde vivir. Después, cuando esté asentado, traeré a mi novia a vivir conmigo”, explica el nuevo refuerzo de un “decano” que de a poco va tomando color dentro de un lienzo al que todavía le faltan algunos detalles importantes.
Falta otro par de volantes, un lateral izquierdo, un tercer arquero y lo que más preocupa al DT, un centrodelantero que venga a luchar por la titularidad con Luis Rodríguez y Diego Jara.