“Por suerte se nos dio. La verdad que se me escaparon varias carreras que tenía para ganar, pero gracias a Dios la espera terminó y podemos festejar por primera vez en la categoría. Este triunfo significa todo para mí porque es mucho el esfuerzo que hacemos con mi equipo para correr. Y lograrlo con Alfa Romeo es todavía más significativo”.
Con estas palabras describió Guillermo D’Aguanno las sensaciones que le provocó su primera victoria en la Clase 3 del Turismo Nacional, obtenida en el autódromo “Rosendo Hernández” de San Luis. El porteño amagó en reiteradas ocasiones con lograr dicho objetivo, no obstante diferentes inconvenientes mecánicos o incidencias de carrera se lo impidieron. Sin embargo, en la cita puntana la espera terminó.
La tarea no fue sencilla. No porque largó la final en la quinta posición, sino porque delante de él tenía pilotos muy difíciles de pasar y que el sábado habían mostrado un gran rendimiento. No obstante, el oriundo de Mataderos fue ganando posiciones en la fila india hasta llegar, en la 13ª de las 20 vueltas pactadas, a la segunda plaza por detrás de Matías Rossi, el líder del torneo y referente en la división. “Me sorprendió cuando se me tiró en la primera curva y después no lo pude seguir. Su auto tenía un ritmo impresionante”, afirmó el representante de Del Viso, que de todos modos hizo un gran negocio en función del campeonato dado que estiró su ventaja.
El podio lo completó el chaqueño Matías Muñoz Marchesi (Chevrolet Cruze). Pasó la cita de San Luis y en ella Alfa Romeo volvió a irse triunfador tras 27 años dado que no lo hacía desde 1987 con Jorge Maggi (Alfa Romeo GTV).