Estudiantes denuncian que una sala de la Facultad de Artes está destruida
Alacranes, insectos, ratas, perros recostados en huecos bajo las escaleras, techos con cañerías al aire y goteras por doquier, sillas y pisos rotos. Eso es lo que muestran unas fotografías enviadas por un grupo de estudiantes de la Facultad de Artes de la UNT. “Así se estudia en la UNT. Las siguientes fotos las sacamos los alumnos de Teatro, en el anexo de la Facultad de Artes. Este es el único lugar donde estudiamos, ensayamos y tenemos clases. Hace varios años que la Paul Groussac (el aula) se mantiene en estas condiciones y ahora está empeorando”, comentaron los estudiantes en el mensaje que enviaron a nuestro diario.
Una alcantarilla de la peatonal muñecas está tapada por residuos
Un lector envió la foto de una alcantarilla repleta de basura, que según comentó está ubicada en la peatonal Muñecas al 200, frente a un negocio de ropa deportiva. “Está tapada por una bolsa de residuos, por lo que impide el desagote”, comentó. Solicitó a las autoridades correspondientes que limpien esa alcantarilla y todo el sistema de desagüe de la peatonal.
Desde hace días los vecinos Están sin agua en el barrio Sidanto, de Las Talitas
En el barrio Sidanto (Las Talitas) una vecina se queja por el serio problema de falta de agua que padecen desde hace años. “Esto sucede hace mucho, pero desde hace cuatro días empeoró la situación. Durante el día estamos sin el suministro y de noche nos dan unas gotitas. No podemos cargar los tanques y gastamos una fortuna en agua potable. Ya he reclamado muchas veces pero no nos dan respuesta. Una vez me dijeron que estaban arreglando las cloacas, y otra vez aseguraron que ya lo iban a arreglar. Hasta ahora no hay solución”, describió Lucrecia, vecina de la zona. También dijo que por las calles hay muchas pérdidas de agua potable y que rompieron el pavimento. “Eso nos da bronca y tristeza”, se quejó.
Mirá cómo esta mujer lleva a una niña en la moto sin medir consecuencias
La imprudencia en las calles de la ciudad de Alderetes parece moneda corriente, opinó un lector, y envió una foto que ejemplifica su opinión. En la imagen se puede ver a una mujer manejando una motocicleta. Ella lleva a una niña sin protección ni casco en el mismo vehículo y sin siquiera sostenerla de la mano. “A esta foto la saqué en la ciudad de Alderetes, frente al Instituto Privado Rivadavia. Qué mujer imprudente. No mide las consecuencias”, comentó el lector. Exigió a las autoridades que hagan más controles en el tránsito de esa ciudad.
Los vecinos marcaron un bache con lo que tenían a mano
Desde hace varios días un pozo se ha convertido en el mayor peligro de la avenida Roca y Ayacucho. Un lector envió la foto del bache, que aparenta ser muy profundo. En ese lugar, luego de que se hundiera un colectivo, los vecinos lo marcaron con lo que encontraron (cajones y hasta con un cartel de parada de colectivo) para evitar nuevos accidentes.
Niños viajan sin protección en la caja de una camioneta por la peligrosa ruta 38
Mientras conducía por la ruta 38, a un lector le llamó la atención una situación lamentable e imprudente: en la caja de una camioneta iban dos niños sin ninguna protección. Por ello pidió a su acompañante que sacara una foto de lo que ocurría. “Se trataba de una camioneta Saveiro que llevaba dos niños en la caja por la ruta 38, de norte a sur, en el tramo Concepción-Aguilares. Un verdadero peligro”, describió el lector.
Un basural clandestino crece sin pausa a un lado del concurrido río Lules
Una imagen a la vera del río Lules es contrastante: por un lado está el hermoso paisaje reverdecido, de montañas y laderas eternas, y por otro se notan montículos de basura. “Los camiones de cooperativas contratados por el municipio arrojan todo tipo de residuos en esa zona y luego los compactan. Las autoridades parecen ajenas a esta situación”, describió el lector. Él envió varias imágenes de cómo el lugar se está transformando en un basural clandestino que crece sin parar.
Desde hace siete meses en el barrio Capitán Viola no tienen agua
Dora Guerra, vecina del barrio Capitán Viola, comentó que no tienen agua durante el día, y que durante la noche vuelve el suministro pero sólo salen unas gotas de los caños, lo cual no alcanza para nada. “Vivo en Congreso al 2.700. De noche tenemos que despertarnos para tratar de llenar bidones. Esto sucede desde hace siete meses. Desde la SAT nos aseguran que ya lo van a solucionar, pero no pasa nada”, indicó Guerra. Por otra parte, comentó que a pesar de este problema de todos modos les llegó la boleta del agua con aumento: “pagamos entre $150 y $180, pero nuestros tanques de agua no se llenan”, sostuvo.