Los educadores de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) deberán esperar al menos una semana más para que la Asamblea Universitaria consagre en el estatuto la carrera docente. El cuerpo votó un cuarto intermedio hasta las 8 del miércoles próximo porque no pudo concluir el debate sobre los puntos que formaban parte del orden del día de ayer: preámbulo y carrera docente. De hecho, ni siquiera quedó definido el preámbulo: cuando restaba por analizar pocas líneas -y pese a que habían votado cerrar el tema este miércoles-, algunos asambleístas se fueron retirando y dejaron al cuerpo sin quórum.

La sexta sesión plenaria de la Asamblea Universitaria empezó a las 8.30 con la presidencia de la rectora Alicia Bardón. Esta presentó la orden del día y preguntó a los asambleístas con qué tema querían comenzar: aquellos eligieron el preámbulo. Afuera se concentró una movilización de educadores, convocada por la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNT (Adiunt), que había decretado un paro de 24 horas. Los académicos reclamaban la inmediata sanción de la carrera docente y de la plena ciudadanía preuniversitaria -no figuraba en la agenda-. Cuando el debate por el preámbulo llevaba 90 minutos, los docentes ingresaron al hall del Virla con bombos y redoblantes. A las 11.35 se votó un break de 20 minutos, tras el cual se reabrió la discusión, esta vez presidida por José García, vicerrector y coordinador de la comisión que orienta el proceso de reforma.

Ciudadanos y gratuidad

Durante el debate, los asambleístas proponían precisiones a algunos conceptos incluidos en el borrador del preámbulo o pedían que se agregaran otros. Un par de cuestiones, en especial, salpimentaron la discusión. La primera giraba en torno del género de algunas palabras. El texto propuesto decía: “(La UNT) considera como su objetivo formar ‘ciudadanos/as’...”. “Quiero saber si tomaremos las reglas de la Real Académica Española (RAE) o un uso que se vino imponiendo desde lo político”, indagó Adriana Corda, consejera directiva de Filosofía y doctora en Letras, y precisó que, para el plural, la RAE aglutina el femenino dentro del masculino. Algunos pares arguyeron que, si bien el uso del femenino podía no ser correcto desde lo normativo, sí lo era desde lo legislativo. Al final, prevaleció el uso según la norma y quedó ‘ciudadanos’.

El otro tema polémico surgió a partir de la moción del asambleísta Gustavo Wallberg (Ciencias Económicas), que pidió que se retire la palabra ‘gratuita’ de la frase: “como institución educativa, pública y gratuita, democrática...”. El tema se disparó hacia varios tópicos: la venta de servicios de las facultades o de la propia universidad; las patentes que se producen a partir de las investigaciones y el carácter arancelado de los cursos de posgrado. El cuerpo rechazó masivamente la moción de quitar el concepto de gratuidad. Al respecto, la mayoría se inclinó hacia la chance de que, en el futuro, los cursos de posgrados sean gratuitos para los docentes de la UNT.

Protesta y explicación

Luego de la sesión, el secretario general de Adiunt, Ariel Osatinsky, criticó que se haya considerado quitar el concepto de gratuidad. “Esto es inconcebible: evidencia que algunos asambleístas son partidarios de la privatización educativa y que otros están totalmente adaptados al ahogo presupuestario al que nos vienen sometiendo los gobiernos a lo largo de los años”, protestó. Respecto del hecho de que la Asamblea no avanzó con la carrera docente, dijo: “desde el lunes vamos a una semana de paro votado por Conadu Histórica”. El vicerrector García explicó por qué, según su criterio, el cuerpo no agotó el temario. “Hay que ser muy precisos y cuidadosos a la hora de trabajar un texto como el preámbulo”, afirmó.